Estados Unidos vive horas de conmoción tras la muerte de Charlie Kirk, joven activista de derecha y aliado cercano del expresidente Donald Trump. El dirigente falleció este miércoles luego de haber recibido un disparo en el cuello durante un acto público en la Utah Valley University, en el estado de Utah.
El ataque ocurrió en medio de un encuentro con estudiantes. Kirk fue trasladado de urgencia al hospital, pero los médicos no pudieron salvarle la vida. La noticia fue confirmada por el propio Trump a través de su red Truth Social, donde lo despidió con un mensaje cargado de emotividad.
“El grande, e incluso legendario, Charlie Kirk, está muerto. Nadie entendió o tuvo el corazón de la juventud en los Estados Unidos de América mejor que Charlie. Era amado y admirado por todos, especialmente yo, y ahora ya no está con nosotros. Melania y mis condolencias van con su hermosa esposa Erika y su familia. Charlie, te queremos”, escribió el exmandatario, dejando en claro la cercanía que tenía con el activista.
En un comunicado oficial, la universidad confirmó que la policía se encuentra investigando lo ocurrido. En un primer momento, se informó que había una persona detenida, pero poco después un vocero de la institución aclaró que no se trataba del autor del disparo. Según la agencia AP, las fuerzas de seguridad continúan buscando al responsable del ataque.
Charlie Kirk era una de las figuras más influyentes del movimiento conservador juvenil en los Estados Unidos. Con apenas 30 años, se había convertido en un referente mediático y político, participando activamente en la campaña de Trump y en la defensa de posturas ultraconservadoras en temas sociales y económicos.
La noticia generó un fuerte impacto en la escena política norteamericana, especialmente en el ala republicana, donde era considerado un puente clave con el electorado joven. Su asesinato no solo abre un capítulo de dolor para sus seguidores, sino que también instala preocupación por la seguridad en los actos políticos de cara a las elecciones en Estados Unidos.
Mientras tanto, las autoridades locales refuerzan las medidas de seguridad y mantienen activa la investigación para dar con el paradero del atacante.
