La justicia de Estados Unidos impidió un desfalco por más de 14.000 millones de dólares contra el sistema de salud y las fuerzas de seguridad incautaron más de 245 millones de dólares en efectivo, vehículos de lujo, criptomonedas y otros activos.
La investigación contra el fraude a seguros médicos incluyó procesos penales contra 324 personas, declaró Matthew Galeotti, jefe de la división penal del Departamento de Justicia, en rueda de prensa. Varios de los acusados son de Rusia, Europa del Este, Pakistán y otros países.
“Es el mayor fraude de atención médica en la historia de los Estados Unidos”, escribió el diario The Washington Post. El intento de fraude se estima en 14.600 millones de dólares, de los cuales la pérdida real fue de 2.900 millones, de acuerdo a los cálculos.
El caso más importante, que trascendió la semana pasada, involucra a una red con sede en Rusia que defraudó a Medicare, el programa de seguro médico para personas mayores de 65 años, mediante el uso de datos personales robados a más de un millón de estadounidenses.
Esta red presentó solicitudes de reembolso por valor de 10.600 millones de dólares para diversos dispositivos médicos en nombre de estos pacientes y sin su conocimiento.
Un total de 19 personas fueron acusadas en Estados Unidos en este caso, 12 de las cuales fueron arrestadas, incluidas cuatro en Estonia, informó el Departamento de Justicia en un comunicado este lunes.
“Observamos una tendencia alarmante de organizaciones criminales transnacionales que participan en esquemas criminales cada vez más sofisticados y complejos que defraudan al sistema de salud estadounidense”, dijo Galeotti.
Entre los 324 acusados figuran "96 profesionales de la salud con licencia, incluidos 25 médicos", declaró Christopher Delzotto, jefe de la unidad del FBI, la policía federal, encargada de combatir el fraude en seguros médicos.
