MÁS DE INTERNACIONALES



REUNIÓN DE MANDATARIOS

Joe Biden recibió a Lula da Silva: “Nuestras democracias fueron puestas a prueba pero prevalecieron”

El presidente de Brasil es recibido en la capital de Estados Unidos como un líder regional, un lugar que no lograron ocupar Alberto Fernández ni otros mandatarios sudamericanos.

Joe Biden recibió a Lula da Silva: “Nuestras democracias fueron puestas a prueba pero prevalecieron”

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llegó a Washington en el marco de su primera visita al país tras regresar a la Presidencia del gigante sudamericano. Lo acompañan los ministros Mauro Vieira, de Relaciones Exteriores; Fernando Haddad, de Finanzas; Marina Silva, de Medio Ambiente; Anielle Franco, de Igualdad Racial; el embajador Celso Amorim; el secretario del Ministerio de Desarrollo Económico y Comercio, Marcio Elias Rosa; y el senador Jaques Wagner.

El mandatario ya está reunido con el presidente Joe Biden, tras una ocupada agenda en Washington. La prensa accedió al inicio del encuentro y pudo ver cómo Biden daba la bienvenida a Lula y le recordaba cómo las democracias de Brasil y Estados Unidos, las más pobladas del continente americano, han tenido recientemente que superar un “examen”.

Biden hacía referencia así al asalto al Capitolio de EEUU en enero de 2021 por partidarios del entonces presidente Donald Trump (2017-2021) y al ataque del pasado 8 de enero a los Tres Poderes de la nación en Brasilia por parte de simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro (2019-2023).

En ambos casos, destacó Biden, la “democracia triunfó” y se “rechazó la violencia política” en las dos democracias “más grandes” del hemisferio occidental.

En respuesta, Lula agradeció a Biden su “solidaridad” y lamentó que Brasil hubiera “estado aislado del mundo durante los últimos cuatro años”, en referencia al Gobierno de Bolsonaro, quien ahora está en el estado de Florida (EEUU) y ha pedido un visado para alargar su estancia en el país.

Lula afirmó que su antecesor minusvaloraba la importancia de las relaciones internacionales y vivía “con noticias falsas por la mañana, por la tarde y por la noche”.

Ante esas palabras, Biden se río y dijo en tono de broma: “Eso me suena”. Lula continuó diciendo que “nunca deberían repetirse” los actos de violencia contra el Capitolio de EEUU y contra las sedes del Ejecutivo, Legislativo y el Tribunal Supremo brasileño.

Enfatizó, además, la necesidad de trabajar juntos en la lucha contra el cambio climático y en iniciativas para hacer frente a la creciente deforestación de la Amazonia, que se aceleró bajo el Gobierno de Bolsonaro. “Todos tenemos obligación de dejar a nuestros hijos y nietos un mundo mejor que el que recibimos de nuestros padres”, apuntó al respecto Lula y agregó: “Vamos a tomarnos muy en serio este tema del clima. Y le diré una cosa más, presidente (Biden), necesitamos establecer una nueva conversación para construir una gobernanza mundial más fuerte, porque el tema del clima, si no tiene una gobernanza global (...) no va a funcionar”.

Por su parte, Biden destacó que ambos países tienen “valores compartidos” por lo que existen “fuertes lazos” que los vuelven “socios naturales”.

La visita de Lula a Estados Unidos, justo al inicio de su mandato y por invitación del presidente Biden, marca el reinicio de las relaciones entre los dos países, que en 2024 cumplirán 200 años de diplomacia, indica una nota de prensa publicada por la página oficial de la Presidencia brasileña.

“Dos de las democracias más grandes del mundo, Brasil y Estados Unidos, enfrentan desafíos similares relacionados con la radicalización política y el discurso de odio en el espacio virtual. También en el centro de la agenda está la reactivación del compromiso brasileño con la conservación del medio ambiente y la búsqueda de un mayor compromiso de los países desarrollados en el cumplimiento de sus compromisos de financiación en el área climática”, continua la nota.

Antes del esperado encuentro con el Presidente estadounidense, Lula tuvo un agenda cargada, que incluyó reuniones con el senador Bernie Sanders, con diputadas y diputados del Partido Demócrata, y también con representantes de la central sindical más grande de Estados Unidos, AFL-CIO. Retornará a Brasil el sábado al mediodía.

En una entrevista con la cadena de noticias CNN, Lula alertó del surgimiento de una “ultraderecha organizada mundial” -en países como España, Francia, Hungría y Alemania- y pidió, en ese sentido, prestar atención a las “actitudes nazis” que de ello pueden derivar. “Si no tenemos cuidado, habrá actitudes nazis a partir de ahí”, mencionó.

Respecto al episodio del 8 de enero en su país, al cual en reiteradas oportunidades ha comparado con el asalto al Capitolo norteamericano en manos de seguidores del ex presidente Donald Trump, el mandatario se mostró confiado de que la “democracia prevalecerá”. “Nunca pudimos imaginar que en un país que era el símbolo de la democracia en el mundo, alguien pudiera intentar invadir el Capitolio”, comentó sobre el hecho del 6 de enero de 2021, previo a calificar a su antecesor, Jair Bolsonaro, un “fiel imitador de Trump” al que “no le gustan los sindicatos, los trabajadores, las mujeres, o los negros”.

Bolsonaro viajó a Estados Unidos antes de finales del 2021 y permanece allí desde entonces. A pesar de que la Justicia ha iniciado casi media docena de investigaciones sobre él por los recientes ataques -a los que aún “vendrán más”- Lula anunció que no le pedirá a Biden que intervenga para extraditarlo. “No voy a hablar de eso, que lo decidan los tribunales, un día volverá a Brasil y se enfrentará a los juicios que tiene en su contra”, sostuvo.

Por otro lado, Lula anunció que el ex Presidente podría ser condenado “en algún tribunal internacional por el genocidio” en el marco de lo que fue su gestión de la crisis sanitaria de la pandemia del coronavirus. También, dijo que podría ser “castigado” por “el genocidio contra el pueblo indígena yanomami”, a quien las instituciones y la permisividad de su gobierno abandonó con la minería ilegal.

Respecto a los problemas medioambientales que aquejan al país, Lula reconoció que hay mucho trabajo por delante, enfatizando en que la herencia recibida da cuenta de un serio retroceso en los últimos años. Es por ello que se ha comprometido a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero hasta en un 39% y luchar contra la deforestación legal.

Por último, en la entrevista se abordó el tema de la guerra de Rusia en Ucrania, próxima a cumplir un año. Desde el pasado 24 de febrero, Lula ha mantenido una postura muy crítica sobre las potencias occidentales que condenaron el conflicto ruso por lo que insistió, una vez más, en que Brasil mantendrá su postura y no se unirá de ninguna manera a la guerra. Su objetivo es “terminar” con ella, prosiguió.

De todas formas, sí reconoció el “derecho a defenderse” de Ucrania ante el “error” cometido por Putin.

En tanto, se mostró abierto a continuar en su rol de intermediario en el conflicto, que ya lo ha llevado a reunirse con el canciller alemán Olaf Scholz, a quien le comunicó que desea hablar con el líder del Kremlin e, inclusive, con Xi Jinping.

“Quiero hablar de paz con Putin. Quiero hablar de paz con el presidente Biden, quiero hablar de paz con Xi Jinping. Quiero hablar de paz con India, con Indonesia, porque para mí el mundo solo se desarrollará si tenemos paz”, concluyó.

El Ejecutivo brasileño indicó que, en el ámbito económico, “se están realizando esfuerzos para impulsar las inversiones, particularmente en transición energética y generación de energía limpia, y una mayor integración de las cadenas productivas. Estados Unidos es el segundo socio comercial de Brasil y el principal destino de nuestras exportaciones de productos industrializados”, resaltó.

Una de las incógnitas es si Biden usará la visita con Lula para anunciar la que sería la primera contribución de EEUU al Fondo Amazonía, que fue creado en 2009 para ayudar a combatir la deforestación del Amazonas y se financiaba principalmente con las aportaciones de Noruega y Alemania.

Noruega y Alemania congelaron sus aportaciones a ese fondo con el avance de la deforestación del Amazonas bajo el Gobierno del ex presidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2023); pero han expresado su deseo de reanudarlas ya con Lula en el poder.

Más allá del Amazonas, el otro gran tema del encuentro será la defensa a la democracia, especialmente después de que el 8 de enero partidarios de Bolsonaro asaltaran las sedes de los tres poderes de la nación en Brasilia.

Según un funcionario de alto rango consultado por la agencia de noticias EFE, los dos líderes hablarán sobre la democracia en sus propios países, pero también conversarán de manera más amplia sobre iniciativas para fortalecerla a nivel regional y en todo el mundo, incluida la llamada “Cumbre de la Democracia” que ha promovido Biden y que se celebrará en marzo de este año.


¿Te gustó la noticia? Compartíla!