Unos 1.000 policías de Río de Janeiro realizaron este jueves un megaoperativo en el Complejo do Salgueiro, en San Gonzalo, para capturar a líderes del Comando Vermelho, la mayor organización criminal del estado. La acción marcó la segunda fase de la Operación Contención, que dejó 122 muertos en octubre.
Las fuerzas de seguridad ingresaron de madrugada y enfrentaron tiroteos en distintos sectores del conjunto de favelas. Hasta el mediodía, las autoridades no informaron muertos, heridos ni detenciones.
1.000 policiais civis e militares estão mobilizados em uma nova etapa da Operação Contenção, no Complexo do Salgueiro, São Gonçalo. A ação foi deflagrada nas primeiras horas desta quinta (11). Criminosos incendiaram barricadas para tentar impedir o avanço das forças de segurança. pic.twitter.com/deouDStYdt
— @pmerj (@PMERJ) December 11, 2025
El despliegue movilizó 880 agentes de la Policía Militar y 120 de la Policía Civil, con apoyo de 20 blindados y dos helicópteros. Los policías retiraron barricadas incendiadas y vehículos quemados que los narcotraficantes habían colocado para bloquear los accesos.
En la primera fase, realizada en los complejos de Penha y Alemão, la operación terminó con 122 muertos, entre ellos cinco policías, y se convirtió en la más letal en la historia de Brasil. A pesar del nivel de violencia, los agentes no capturaron a los líderes buscados.
La nueva etapa apunta a cumplir 44 órdenes de arresto, incluido el principal objetivo: Antonio Ilário Ferreira, alias Barricó, considerado jefe de los pistoleros del Comando Vermelho en San Gonzalo. El narco cumplía una condena de 27 años, pero quedó libre en 2019 por un beneficio judicial y permanece prófugo.
La Operación Contención busca frenar la expansión territorial del Comando Vermelho, una estructura criminal surgida en las cárceles cariocas en los años 70 y hoy presente en la mayoría de los estados de Brasil y en países vecinos.
