Máximo Thomsen decidió cambiar de estrategia para que la Justicia le reduzca su sentencia a cadena perpetua por el crimen de Fernando Báez Sosa.
Después de que la Cámara de Casación confirmara en marzo pasado las condenas a los ocho rugbiers por el asesinato ocurrido en enero de 2020 en Villa Gesell, el joven dio evidentes muestras de su cambio de estrategia jurídica. A fines de ese mes, Thomsen eligió como abogado a Francisco Oneto por Hugo Tomei, quien había asumido la representación de todos los condenados, a excepción de Matías Benicelli, durante el juicio.
Oneto es un reconocido abogado penalista que se postuló como vicegobernador a la provincia de Buenos Aires en 2023, por La Libertad Avanza, al integrar la fórmula Carolina Píparo.
A días de asumir el rol, el letrado reveló que Máximo Thomsen “omitió declarar que el que dio la primera piña que derribó a Fernando Báez Sosa y lo puso fuera de combate fue Enzo Comelli. En ese marco, el defensor le pidió a la Corte Suprema de Justicia Bonaerense que declare nulo el juicio que condenó a su cliente prisión perpetua.
Este martes se difundirá una entrevista que Thomsen le concedió a Telenoche desde la Alcaldía N°1 de Melchor Romero, donde pasa sus días en prisión.
De acuerdo a lo que se adelantó, el joven dio detalles de cómo empezaron los incidentes dentro del boliche Le Brique y de lo que pasó en la calle hasta el deceso de Fernando Báez Sosa. En su relato por TV, Thomsen solicitó que que la Justicia no le impute cosas que, según dijo, hicieron otros.
Entre lágrimas, Thomsen también pidió perdón por el asesinato de Báez Sosa y aseguró que toda las noches reza por él.
Será el primero de los rugbiers en romper el silencio. Ya no es el Thomsen que parecía imperturbable durante las audiencias del juicio ni el que estaba dispuesto a salvarse con la misma estrategia judicial que el resto de sus compañeros.
Crimen de Fernando Báez Sosa: las condenas de los rugbiers
Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Luciano Pertossi y Matías Benicelli fueron condenados a prisión perpetua por el delito de “homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas, en concurso ideal con lesiones leves”.
Por su parte, Lucas Pertossi, Ayrton Viollaz y Blas Cinalli recieron 15 años de prisión, por ser partícipes secundarios del homicidio de Báez Sosa “doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas, en concurso ideal con lesiones leves”.
