El Gobierno nacional inició una ronda de reuniones con gobernadores para fortalecer la relación con las provincias y avanzar en las reformas estructurales y el Presupuesto 2026. En este contexto, Salta ocupa un lugar central, con Gustavo Sáenz reclamando recursos para obras de infraestructura que impacten directamente en el desarrollo regional.
El nuevo ministro del Interior, Diego Santilli, junto al jefe de Gabinete, Manuel Adorni, encabezan los encuentros en la Casa Rosada, destinados a establecer consensos políticos y coordinar la ejecución de proyectos en todo el país. Aunque la discusión sobre la coparticipación quedó postergada, el Gobierno muestra disposición a retomar el tema en los próximos meses, un punto clave para provincias como Salta que dependen de los fondos nacionales.
En la agenda de la provincia del norte argentino se destacan obras viales, proyectos hídricos y mejoras en servicios públicos, sectores donde el financiamiento nacional es determinante. Desde la gestión de Sáenz aseguran que contar con apoyo federal es esencial para planificar y concretar obras que generen empleo y desarrollo local.
La estrategia del Gobierno incluye visitas de Santilli a varias provincias, entre ellas Salta, Mendoza, Chaco y San Luis, con el objetivo de reforzar la cercanía con los mandatarios y garantizar que los proyectos locales se integren a la planificación nacional. Para Salta, estas reuniones representan la oportunidad de consolidar acuerdos concretos y asegurar partidas presupuestarias para obras prioritarias.
Además del financiamiento, la relación con la Nación busca fomentar un federalismo activo, donde las provincias tengan voz en la definición de políticas públicas. Para Salta, esto significa avanzar en infraestructura, energía, transporte y programas sociales adaptados a la realidad local.
El vínculo entre Casa Rosada y provincias como Salta será determinante para el éxito del Presupuesto 2026 y de las reformas que impulsa el Gobierno. Mantener un canal de diálogo constante permitirá articular proyectos, destrabar fondos y garantizar que las decisiones nacionales se traduzcan en beneficios concretos para cada región, fortaleciendo la cooperación federal en todo el país.
