Los fiscales penales Ramiro Ramos Ossorio y Gabriel González han ampliado de manera provisional la imputación contra Hugo Matías Paz, el joven acusado de disparar y amenazar en un violento hecho ocurrido en el bar Temple, en Paseo Güemes en octubre del año pasado.
Ahora se le acusa como autor de los delitos de tentativa de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego (en dos hechos), amenazas, y tenencia y portación de arma de guerra agravada por la supresión del número o grabado del arma de fuego en concurso real.
Inicialmente, Paz había sido imputado por tentativa de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego, lesiones leves, tenencia, portación de arma de guerra y daños en concurso real. Sin embargo, la ampliación de la acusación se basa en los avances de la investigación, que incluyen testimonios, análisis de cámaras de seguridad, una reconstrucción virtual y los informes de peritos del CIF. Estos elementos permitieron establecer que la conducta de Paz se ajusta a una calificación más grave, lo que agrava su situación procesal.
Durante la audiencia de ampliación de imputación, Paz estuvo acompañado de su defensa particular y prestó declaración.
El episodio, que por suerte no tuvo un final trágico, ocurrió la noche del 22 de octubre del año pasado cuando Hugo Matías Paz lllegó en estado de ebriedad a una cervecería. Los empleados del lugar se negaron a atenderlo, lo que desencadenó una discusión. Paz se retiró del lugar, pero regresó minutos después conduciendo un vehículo en contramano.
Al estacionar, Paz ingresó al bar, extrajo un arma de fuego y efectuó al menos tres disparos contra el personal, para luego huir. Afortunadamente, ninguno de los trabajadores resultó lesionado. Los clientes, al escuchar los disparos, salieron corriendo y se dispersaron en la calle.
