En el caso de uno de los imputados, la jueza Carolina Sanguedolce unificó la pena con una condena anterior en el monto de un año y cinco meses de prisión efectiva.
Uno de los hermanos fue declarado reincidente por segunda vez y, el otro, reincidente por octava vez.
Fueron condenados por la sustracción de prendas de vestir valuadas en aproximadamente un millón de pesos de un local comercial ubicado en el centro (Alvarado al 200). También se llevaron una pava eléctrica y una valija en la cual cargaron parte del botín.
El desplazamiento de los sujetos quedó registrado en varias cámaras de seguridad ubicadas en la zona.
