La frontera norte de Salta volvió a ser escenario de un importante hallazgo de drogas. Durante la noche del viernes, Gendarmería Nacional detectó una caja sospechosa en la parada de colectivos frente a la terminal de Aguas Blancas. Al acercarse, los efectivos advirtieron que personas desconocidas habían abandonado el paquete y se dieron a la fuga antes de ser interceptadas.
Al inspeccionar la caja, los gendarmes encontraron trece paquetes con cocaína que sumaban 12,730 kilos, con un valor estimado en el mercado negro de más de 272 millones de pesos. La maniobra evidencia la sofisticación de las organizaciones delictivas, que utilizaron un aire acondicionado como camuflaje para trasladar la droga.
El procedimiento se desarrolló bajo las leyes 22.415 (Código Aduanero) y 23.737 (Estupefacientes), diseñadas para combatir el narcotráfico en corredores fronterizos como Aguas Blancas, donde los pasos informales facilitan el contrabando.
Aunque no hubo detenidos, los investigadores confían en avanzar gracias a las imágenes de cámaras de seguridad y al análisis de los movimientos en la zona. La Fiscalía Federal Descentralizada de Orán quedó a cargo de determinar el origen y destino del cargamento y posibles conexiones con redes que operan a ambos lados de la frontera.
Este hallazgo se suma a recientes procedimientos en el departamento de Orán, donde la presencia de fuerzas federales busca frenar la circulación de drogas y otros bienes ilegales. La comunidad local reclama mayor control en la zona de la terminal de ómnibus, clave para evitar que colectivos y vehículos de carga sean usados para transportar estupefacientes.
Aguas Blancas, punto crítico en la lucha contra el narcotráfico, sigue bajo vigilancia estricta mientras las autoridades trabajan para anticipar y desactivar nuevas maniobras de contrabandistas que buscan evadir controles en la región.
