Un violento incendio registrado durante la noche del domingo en la Alcaidía General de la ciudad de Salta dejó un saldo de 14 internos hospitalizados, varios de ellos con heridas de gravedad. El foco ígneo se originó en el pabellón B1, donde las llamas y el humo se propagaron rápidamente antes de ser controlados por personal penitenciario y de Bomberos de la Policía de la Provincia.
La situación generó momentos de gran tensión tanto dentro del penal como en las inmediaciones, hasta que las dotaciones de emergencia lograron evacuar el sector afectado. Los detenidos que sufrieron lesiones fueron trasladados de inmediato a distintos hospitales de la capital salteña. Según se informó, seis permanecen internados en terapia intensiva con pronóstico reservado, debido a la gravedad de las quemaduras e intoxicación por monóxido de carbono.
El fiscal penal 1, Pablo Paz, encabeza la investigación para determinar las causas del siniestro. En el lugar trabajaron equipos de Criminalística del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) y Bomberos de la Policía, quienes realizaron pericias y el relevamiento de indicios que permitan establecer el origen del fuego y si se trató de un hecho accidental o intencional.
También intervino personal de Medicina Legal del CIF y de la Policía para la evaluación médica de los internos afectados. El operativo se mantuvo durante varias horas, mientras los investigadores analizaban el estado del pabellón y recolectaban material que pueda aportar a la causa.
El fiscal Paz confirmó que todas las medidas procesales necesarias se encuentran en curso y que, debido a la gravedad del hecho, el expediente será remitido a la Unidad de Graves Atentados contra las Personas. La decisión se tomó en función del artículo 186 inciso 4 del Código Penal, que sanciona a quien provoca un incendio poniendo en riesgo la vida de otras personas.
Aunque por el momento no se difundieron hipótesis oficiales, fuentes vinculadas a la investigación señalaron que se analizan distintos escenarios posibles, entre ellos una eventual pelea interna o el uso indebido de elementos inflamables dentro del pabellón.
El incendio en la Alcaidía vuelve a poner en el centro del debate las condiciones de seguridad dentro de los establecimientos penitenciarios y la necesidad de reforzar los protocolos de prevención. En los últimos años, diferentes organismos de control y derechos humanos han advertido sobre el hacinamiento y las falencias estructurales que afectan a algunos sectores del sistema carcelario provincial.
Mientras tanto, los equipos de salud continúan monitoreando la evolución de los internos heridos, en especial de los seis que permanecen bajo cuidados intensivos. Desde el Ministerio Público Fiscal se informó que el avance de la investigación permitirá determinar responsabilidades y esclarecer las circunstancias que originaron el fuego.
El caso generó preocupación tanto en el ámbito judicial como en la comunidad, ante la magnitud del hecho y el riesgo que implicó para quienes se encontraban dentro del penal. Las autoridades penitenciarias reforzaron la seguridad en el resto de los pabellones y se dispuso un relevamiento interno para evitar nuevos incidentes.
Con la investigación en marcha y los peritajes en curso, se espera que en los próximos días se conozcan resultados preliminares que permitan establecer cómo comenzó el incendio que dejó a más de una decena de internos hospitalizados y a seis de ellos luchando por su vida.
