El juez Martín Daniel Martínez, actual titular del Tribunal de Ejecución y Detenidos de Segunda Nominación, se encuentra bajo sospecha por su posible vinculación con una red de corrupción dentro del penal de Villa Las Rosas. Denuncias de extorsión, pagos en dólares a cambio de beneficios y presuntas coimas a funcionarios judiciales han sacudido los pasillos del sistema penitenciario salteño.
La causa, que involucra a funcionarios del Servicio Penitenciario, internos y familiares, destapó una serie de irregularidades dentro de la prisión. Según testimonios de exinternos, se habrían realizado pagos para obtener traslados a pabellones más tranquilos o incluso semilibertad, todo bajo la promesa de que el juez Martínez intercedería para facilitar estos beneficios.
Uno de los testimonios más fuertes provino de un exinterno que relató cómo, tras negarse a pagar por estos favores, comenzó a ser perseguido y amenazado por varios miembros del penal. En su declaración, mencionó al juez Martínez como uno de los involucrados en la red de coimas que operaba dentro de la cárcel.
El escándalo no es nuevo para Martínez, quien en 2016 fue investigado por cobrar un doble sueldo, uno como subsecretario de Políticas Criminales y otro como juez. Años después, en 2025, se apartó de la causa que involucraba a Lautaro Teruel, tras una denuncia de cobro de coimas publicada en medios locales.
El caso, que tiene a 20 imputados, destapó una compleja red de corrupción en la que se encuentran involucrados no solo funcionarios del penal, sino también internos y familiares, acusados de realizar pagos ilegales a cambio de beneficios penitenciarios.
Mientras continúa la investigación, la sociedad salteña observa con preocupación este escándalo que compromete a una de las figuras más importantes del poder judicial en la provincia.
