El juicio por el femicidio de Jimena Salas sumó una audiencia clave con la declaración de la exsuegra de Javier Saavedra, uno de los principales acusados. Su testimonio aportó datos inéditos sobre el vínculo del imputado con su familia y dio lugar a una nueva interpretación sobre uno de los elementos investigados: la presencia de un perro en la escena del crimen.
La mujer relató que su hija comenzó una relación con Saavedra en noviembre de 2016 y que, durante ese tiempo, él les regaló una perrita llamada Bonis, que quedó en su casa por cuestiones de espacio. Este dato tomó relevancia por las versiones que indicaban que el asesino tenía un perro con él al momento del ataque. La testigo aseguró tener fotos que prueban que no se trata del mismo animal, aunque sí de la misma raza.
La jornada también incluyó declaraciones de familiares de Jimena y de una psicóloga del CIF, quien recordó el relato estremecedor de una de las hijas de la víctima. La niña describió cómo un “señor malo” ingresó al hogar, discutió con su madre y la atacó con un cuchillo. El agresor, según la menor, llevaba un perro y luego las encerró en el baño. Ellas permanecieron allí hasta que su padre llegó al domicilio.
Los hermanos Javier y Carlos Saavedra enfrentan cargos por homicidio doblemente agravado por femicidio y ensañamiento, con la participación premeditada de más de una persona. La fiscalía sostiene que el crimen fue planificado y ejecutado con extrema violencia, mientras la defensa insiste en la falta de pruebas concluyentes.
El hecho ocurrió el 27 de enero de 2017 en el barrio San Nicolás de Vaqueros. Jimena estaba sola en su casa con sus dos hijas pequeñas cuando fue atacada brutalmente. Desde entonces, su asesinato se convirtió en uno de los casos más impactantes de la provincia.
El juicio, que se desarrolla ante un tribunal colegiado, continuará en los próximos días con nuevos testimonios y peritajes. Mientras tanto, la comunidad salteña sigue atenta al desarrollo de un proceso que busca dar respuestas a un crimen que marcó un antes y un después en Vaqueros.
