El Ballet Salta publicó un comunicado oficial este jueves para aclarar la situación de su directora, Marina Jiménez, condenada a 10 años de prisión por abuso sexual en perjuicio de su nieto. La institución destacó que la sentencia aún no está firme, que se esperan los fundamentos del fallo y que la docente continuará en libertad mientras se resuelven los recursos legales presentados por su defensa.
Según el comunicado, la condena se encuentra en etapa de apelación y Jiménez, de 74 años, sigue cumpliendo con las obligaciones procesales y poniéndose a disposición de la Justicia. La institución subrayó su respeto por el funcionamiento del sistema judicial y pidió que no se interfiera en el proceso en curso, al tiempo que reafirmó su compromiso con la transparencia y la continuidad de las actividades culturales.
El fallo provocó un fuerte impacto en la comunidad artística de Salta, donde Jiménez es considerada una referente histórica del folklore escénico argentino y formadora de varias generaciones de bailarines. Su trayectoria se remonta a 1970, cuando fundó el Ballet Salta junto a su esposo, Hugo Jiménez, consolidando la compañía como embajadora del folklore nacional e internacional.
La sentencia se conoció a partir de la denuncia de su nieto, ya adulto, quien relató los abusos sufridos durante su infancia. La causa avanzó con pericias, testimonios y audiencias, y ahora se encuentra en etapa de revisión por parte de los tribunales. Dependiendo de la decisión final, la pena podría cumplirse en modalidad domiciliaria, considerando la edad y el estado de salud de la condenada.
Mientras tanto, el Ballet Salta mantendrá su actividad artística y educativa, buscando equilibrar la continuidad de sus funciones y clases con el respeto al proceso judicial. La institución reafirmó que su postura busca priorizar la transparencia y la responsabilidad institucional frente a un hecho que sacudió al ámbito cultural salteño.
