Una violenta pelea ocurrida en la madrugada del domingo en el barrio San Jorge de Rosario de Lerma terminó con tres hombres detenidos e imputados por agredir a un joven de 24 años con botellas rotas y un arma casera. La víctima debió ser asistida en el hospital local por una herida punzante en el tórax y otras lesiones menores.
El fiscal penal de Rosario de Lerma, Daniel Alejandro Escalante, imputó de manera provisional a los tres involucrados —de 24, 28 y 31 años— por la presunta comisión del delito de lesiones en poblado y en banda, mientras avanza la investigación para determinar la responsabilidad de cada uno en los hechos.
Una agresión que comenzó con una discusión vecinal
Según consta en la denuncia presentada el 12 de octubre, el incidente ocurrió alrededor de las 00:30 de la madrugada, cuando el joven damnificado se encontraba con familiares frente a la casa de su madre. En ese momento, observaron que un menor conocido de la familia era perseguido por tres sujetos.
Al intervenir para ayudarlo, el denunciante reconoció a los agresores y mantuvo con ellos una breve confrontación verbal. Los hombres se retiraron del lugar, pero minutos después regresaron armados con botellas rotas y un palo con una punta metálica atada en un extremo, tipo lanza.
De acuerdo con el testimonio de la víctima, uno de los atacantes se le abalanzó directamente y le aplicó una estocada en el pecho, provocándole una herida punzante en el tórax. Acto seguido, los tres comenzaron a arrojar piedras y botellas contra las personas presentes y la vivienda, generando daños materiales y un momento de gran tensión en el vecindario.
Fueron detenidos tras causar destrozos
Tras la agresión, los sujetos se dieron a la fuga. Dos de ellos ingresaron a una sandwichería cercana, mientras que el tercero escapó por calles aledañas. Personal de la Subcomisaría San Jorge logró interceptar rápidamente a los dos primeros y, horas más tarde, aprehendió al tercero, quien fue sorprendido arrojando piedras contra un móvil policial, provocando la rotura del parabrisas.
Al momento de su detención, el hombre presentaba manchas de sangre en el rostro y signos de ebriedad, según informaron fuentes de la investigación.
Durante los procedimientos, los efectivos secuestraron un palo de escoba con manchas de sangre, coincidente con el arma descripta por el denunciante, y recolectaron rastros hemáticos y vidrios rotos en la vía pública.
