La Municipalidad de Aguas Blancas, en la provincia de Salta, ha anunciado la implementación de un nuevo arancel de $1.000 para el uso del estacionamiento público y el mantenimiento de la vía pública, según lo dispuesto por una reciente Ordenanza Municipal.
Esta medida, que entrará en vigencia en los próximos días, busca financiar mejoras en la infraestructura urbana, optimizar el ordenamiento del tránsito vehicular y garantizar el mantenimiento continuo de las calles en esta localidad fronteriza, conocida por su intenso movimiento comercial con la vecina Bermejo, Bolivia.
El anuncio llega en un contexto de alta afluencia vehicular, especialmente durante el reciente fin de semana largo por el Día de la Bandera, cuando las calles de Aguas Blancas se vieron colapsadas por la llegada masiva de visitantes y compradores transfronterizos.
Desde el municipio destacaron que los fondos recaudados por el arancel de estacionamiento se destinarán a obras de mantenimiento vial y otros proyectos que beneficien a la comunidad. “Este arancel será de $1.000 y está establecido mediante la Ordenanza Municipal, con el objetivo de mejorar la infraestructura urbana, garantizar el ordenamiento vehicular y asegurar el mantenimiento continuo de las calles”, comunicó la municipalidad a través de sus redes sociales.
Suba del canon de ingreso: de $500 a $1.000
Además del arancel por estacionamiento, el municipio anunció un incremento en el canon que pagan los vehículos que ingresan a la localidad, pasando de $500 a $1.000. Según el interventor municipal, Adrián Zigarán, esta medida responde a la necesidad de captar recursos frente al “multimillonario movimiento comercial” que caracteriza a Aguas Blancas, pero que deja ingresos limitados para la comuna. “Es lo único que le queda al municipio del movimiento comercial”, afirmó Zigarán en declaraciones a medios locales.
El interventor detalló que, mientras los servicios municipales generan una recaudación mensual de apenas $250.000, el cobro por el ingreso de vehículos podría aportar entre $12 y $19 millones al mes. Sin embargo, Zigarán subrayó que estos ingresos son insuficientes frente al impacto que el intenso flujo comercial tiene en la localidad, especialmente en términos de limpieza. “El movimiento comercial genera un gasto enorme en limpieza por la cantidad de mugre que dejan quienes llegan a la frontera para las compras”, expresó, evidenciando los desafíos que enfrenta el municipio para mantener el orden y la infraestructura en una zona de alta actividad económica.
Impacto y perspectivas
La implementación de estos aranceles ha generado expectativa entre los vecinos y comerciantes de Aguas Blancas, quienes reconocen la necesidad de ordenar el caos vehicular que se agudiza en fechas de alta afluencia. Sin embargo, también despierta interrogantes sobre cómo afectará esta medida a los visitantes y al dinamismo comercial que impulsa la economía local. Desde el municipio agradecieron el compromiso de la comunidad y aseguraron que los fondos recaudados se traducirán en mejoras tangibles para el bienestar general.
Con estas disposiciones, Aguas Blancas busca equilibrar el crecimiento económico derivado de su posición estratégica en la frontera con la sostenibilidad de sus servicios públicos. La efectividad de estas medidas dependerá de su implementación y de la respuesta de los actores involucrados en este vibrante polo comercial del norte argentino.
