En una acalorada sesión del Concejo Deliberante, la problemática de los "trapitos" volvió a irrumpir en la agenda política con un fuerte llamado a la acción por parte de la edil Agustina Álvarez.
La concejala, con un tono firme, demandó mayor rigurosidad en los controles municipales y la aplicación estricta de sanciones conforme al Código de Contravenciones, en respuesta a las crecientes quejas por las prácticas extorsivas de quienes cobran ilegalmente por el "cuidado" de vehículos en la vía pública.
Álvarez no escatimó en señalar la gravedad del asunto: "Si no pagás, te rompen el auto. Ya tuvimos antecedentes el año pasado", denunció, recordando episodios que han alimentado la percepción de inseguridad entre los vecinos. La edil subrayó la urgencia de proteger a la ciudadanía, afirmando que "no se puede exponer a los vecinos a situaciones de peligro ni tolerar amenazas que vulneren su tranquilidad al estacionar".
En su intervención, la concejala instó a la Municipalidad a asumir un rol protagónico en la erradicación de estas prácticas irregulares, exigiendo medidas concretas para garantizar la seguridad en las calles. El debate reavivó la tensión entre la necesidad de orden público y las dinámicas sociales que rodean a los "trapitos", un tema que promete seguir generando controversia en el ámbito político local.
