El río Pilcomayo muestra estabilidad en la mayoría de sus tramos, aunque la curva de La Estrella vieja sigue siendo motivo de preocupación. En el tramo Misión La Paz–Pozo Hondo, el río registró ayer 4,68 metros y descendió esta mañana a 4,55 metros, niveles considerados de aguas medias y sin riesgo inmediato para la población.
El sector de La Estrella vieja presenta desbarrancamientos que amenazan la ruta provincial 54 y las comunidades cercanas, especialmente en el kilómetro 2, donde la erosión del terreno podría generar daños en infraestructura y complicar el tránsito.
Hacia el norte, Villamontes registra un descenso a 2,05 metros, aunque en Puente Aruma el río crece hasta 5,14 metros, lo que podría impactar en la región durante la tarde. Por esto, las autoridades reiteraron la precaución para las poblaciones del Bañado, en Formosa, donde se esperan ascensos en los niveles del río durante los próximos días.
El municipio de Santa Victoria Este desplegó operativos desde Vertientes hasta La Puntana, con maquinarias para abrir caminos alternativos y levantar terraplenes que aseguren el tránsito y el abastecimiento de las comunidades ribereñas. La posible declaración de desastre dependerá de la evaluación de daños en los próximos días y de los informes del Senamhi.
Especialistas recuerdan que, aunque la mayoría de los tramos del Pilcomayo se mantengan estables, la erosión y los cambios locales en el cauce requieren vigilancia constante. Se recomienda a vecinos y transportistas evitar circular cerca de los sectores críticos y seguir de cerca los informes oficiales.
El Pilcomayo, que marca parte de la frontera con Paraguay, es fundamental para la región norte de Argentina por su influencia en la agricultura, la ganadería y el transporte local. La coordinación entre municipios, fuerzas de seguridad y vecinos será clave para prevenir incidentes y garantizar la seguridad de quienes viven cerca del río.
