Más de cien mujeres integraron este martes en San Benito la 2ª edición del Encuentro de Amasadoras, organizado por el programa Pan Casero del municipio salteño. El evento se desarrolló en el Centro Angeleli y reunió a representantes de los 80 grupos que reciben apoyo mediante la donación de harina para elaboración doméstica de panes y bollos.
Durante la jornada, las asistentes mostraron sus panificados —dulces y salados— y compartieron experiencias. Las amasadoras, que se organizan en núcleos de cinco personas, se reúnen dos veces por semana para amasar y elaborar productos para consumo familiar. El gesto solidario se completó con una merienda realizada en conjunto tras las demostraciones. El Programa Pan Casero comenzó a principios del año con la entrega de harina y otros insumos a más de 50 grupos, con supervisión municipal puerta a puerta.
Los beneficiarios suelen residir en barrios vulnerables, organizándose localmente para preparar alimentos tradicionales.
La iniciativa se alineó con estrategias de seguridad alimentaria durante la gestión del intendente Emiliano Durand, quien reforzó la ayuda a través del área de Desarrollo Social.
Además, el impacto se refleja en la creciente visibilidad del programa: recientemente se habilitó un nuevo cupo de inscripción para ampliar el alcance comunitario.
Este tipo de propuestas fortalece el entramado social local y promueve herramientas de autonomía económica, sobre todo en hogares donde el ingreso es limitado. La fórmula del “amasado colectivo” genera no solo alimento, sino también vínculos y saberes compartidos.
