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Salta y Catamarca sellan acuerdo histórico para impulsar los proyectos mineros “Sal de Oro” y “Diablillos – Plata”

La Cámara de Diputados de Salta aprobó un convenio con Catamarca que establece cooperación y reparto equitativo de regalías e impuestos para dos proyectos estratégicos en la región.

Salta y Catamarca sellan acuerdo histórico para impulsar los proyectos mineros “Sal de Oro” y “Diablillos – Plata”

En una sesión marcada por la expectativa política, la Cámara de Diputados de la Provincia de Salta dio luz verde a un acuerdo marco con Catamarca destinado a facilitar y promover los proyectos mineros “Sal de Oro” y “Diablillos – Plata”. Se trata de una medida que busca no solo potenciar la extracción de recursos estratégicos para la economía regional, sino también establecer un marco de cooperación entre ambas provincias que evite disputas históricas por la jurisdicción territorial.

El convenio, impulsado por el Ejecutivo provincial, define que tanto las regalías como los impuestos derivados de estas actividades se repartirán en partes iguales entre Salta y Catamarca. Este esquema asegura que los beneficios económicos lleguen de manera equitativa, evitando conflictos por la distribución de recursos.

Según explicaron desde la Legislatura, el acuerdo incluye la creación de un Comité de Gestión Interprovincial, integrado por representantes de ambas provincias. Este organismo tendrá la función de emitir informes y recomendaciones sobre los proyectos, especialmente en lo que respecta a la cuestión ambiental. Aunque estas resoluciones no serán vinculantes, servirán como guía para que las empresas interesadas en desarrollar minería en la zona cumplan con los requisitos administrativos y legales en ambas jurisdicciones.

El proyecto “Sal de Oro”, a cargo de Posco Argentina, y “Diablillos – Plata” representan inversiones estratégicas para la región. La aprobación legislativa permitirá agilizar los trámites y consolidar un marco jurídico estable que garantice la seguridad jurídica de las empresas y la previsibilidad en la gestión de recursos.

Históricamente, la zona involucrada estuvo marcada por conflictos limítrofes. En 1943, tras una disputa territorial con Chile, el Instituto Geográfico Nacional asignó ciertas áreas a Catamarca y otras a Salta, incluyendo Pastos Grandes y San Antonio de los Cobres bajo jurisdicción salteña. Sin embargo, durante décadas existieron tensiones sobre la explotación de recursos naturales en estos territorios. La firma del convenio en diciembre de 2019 entre ambos gobernadores permitió establecer la zona como “área de cooperación”, buscando resolver desacuerdos y fomentar proyectos productivos de manera conjunta.

La diputada Socorro Villamayor destacó que los acuerdos alcanzados no implican ceder territorio ni renunciar a derechos históricos. Subrayó, además, la voluntad política de los mandatarios provinciales para impulsar el diálogo y alcanzar consensos que antes parecían difíciles de concretar. “Es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre provincias puede generar soluciones eficientes sin confrontación”, señaló la legisladora durante su exposición en la sesión.

El impacto económico del convenio podría ser significativo para Salta y Catamarca. La actividad minera en la región representa una fuente importante de empleo, desarrollo local y recursos para los gobiernos provinciales. Con un reparto equitativo de impuestos y regalías, ambas provincias se aseguran beneficios directos que podrán invertirse en infraestructura, educación, salud y proyectos de desarrollo comunitario en las localidades cercanas a los emprendimientos.

Además, el acuerdo establece protocolos claros para la evaluación ambiental y la supervisión de las operaciones mineras. El Comité Interprovincial tendrá un rol clave en la revisión de los estudios de impacto ambiental, la implementación de medidas de mitigación y la promoción de prácticas responsables de explotación. De esta manera, se busca equilibrar la actividad económica con la conservación de los recursos naturales, un tema central en Salta y el noroeste argentino.

Los proyectos, aprobados en Diputados, ahora avanzan al Senado provincial para su revisión final. Se espera que la cámara alta confirme el acuerdo sin mayores modificaciones, consolidando así un marco jurídico que podría servir como modelo para futuras colaboraciones interprovinciales en el país.

Para las comunidades locales, la noticia representa una oportunidad para el desarrollo económico sostenido. La minería de oro y plata, concentrada en los yacimientos de Salta y Catamarca, genera empleo directo e indirecto, promueve la radicación de proveedores regionales y dinamiza la economía de los pueblos del interior. Además, la cooperación interprovincial asegura que los beneficios se distribuyan de manera más justa, evitando tensiones históricas que habían ralentizado proyectos estratégicos.

En términos políticos, el acuerdo también refleja un cambio de enfoque en la gestión de conflictos limítrofes y recursos naturales. La decisión de conformar comités conjuntos y establecer protocolos claros de cooperación muestra una voluntad de planificación a largo plazo, dejando de lado disputas legales prolongadas que durante años marcaron la relación entre Salta y Catamarca.

El proyecto “Diablillos – Plata” se suma a este esquema como un emprendimiento complementario, fortaleciendo la cadena productiva minera en la región. Con el apoyo institucional y el marco de cooperación definido, ambas provincias podrán trabajar de manera coordinada para atraer inversiones, garantizar seguridad jurídica a las empresas y asegurar que la actividad minera se desarrolle bajo estándares responsables y sostenibles.

En resumen, la aprobación del convenio marca un hito para la minería en el noroeste argentino. La combinación de desarrollo económico, cuidado ambiental y cooperación interprovincial ofrece un modelo de gestión que podría replicarse en otras zonas con recursos estratégicos en disputa. La decisión legislativa no solo beneficia a Salta y Catamarca en términos de ingresos y empleo, sino que también fortalece la gobernanza regional y la confianza entre provincias.

Con la mirada puesta en el futuro, la minería en Salta podría experimentar un impulso significativo gracias a la consolidación de estos acuerdos. La cooperación, el reparto equitativo de recursos y la planificación conjunta dejan atrás décadas de incertidumbre, abriendo paso a un escenario más estable y prometedor para las comunidades locales y para el desarrollo económico de la provincia.


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