La relación entre Benjamín Vicuña y Eugenia “La China” Suárez volvió a estar en el centro de la escena mediática tras un nuevo episodio de tensión vinculado a la crianza de sus hijos en común, Magnolia y Amancio. El actor chileno expresó su profundo malestar en una entrevista con el programa LAM (América TV), luego de enterarse por terceros que sus hijos habían comenzado las clases en Estambul, Turquía, sin haber sido informado previamente por su expareja.
Vicuña, visiblemente molesto, aseguró que la decisión de escolarizar a los niños en otro país alteró por completo la rutina que mantenía con ellos, especialmente en lo que respecta a los horarios de comunicación. “Yo los llamo todos los días a las 7 de la mañana, pero la situación se complicó cada vez más. Cambiaron la rutina por algo. No soy tonto, me di cuenta”, afirmó el actor, dejando entrever que la falta de diálogo con Suárez lo llevó a notar los cambios por sí mismo.
La China Suárez, por su parte, se encuentra instalada en Turquía junto a su pareja, el futbolista Mauro Icardi, y decidió inscribir a sus hijos en una escuela local. Compartió en redes sociales imágenes de los niños vestidos con uniforme escolar, lo que terminó de confirmar la noticia y desató la reacción de Vicuña. Según el actor, no recibió ninguna notificación formal ni detalles sobre el colegio, lo que considera una falta grave en el marco de la patria potestad compartida que ambos mantienen.
“Me gustaría que las cosas volvieran a su lugar, que se hable del trabajo únicamente y que dejemos a los chicos de lado”, expresó Vicuña, remarcando su deseo de proteger la intimidad de los menores y evitar que queden atrapados en el conflicto entre sus padres. Para evitar mayores tensiones, el actor optó por canalizar la situación a través de sus abogados, quienes intentaron comunicarse con los representantes legales de Suárez, aunque sin obtener respuesta durante más de una semana.
