El encuentro, crucial para las aspiraciones de Boca Juniors de avanzar a los octavos de final, se vio interrumpido momentáneamente por las condiciones climáticas adversas, un factor que ha afectado a varios partidos del torneo en los últimos días.
Boca Juniors, que necesitaba una victoria contundente por al menos seis goles y una derrota de Benfica ante Bayern Munich para clasificar, había logrado adelantarse en el marcador con un gol de Lautaro Di Lollo a los 26 minutos, pero Auckland City empató el encuentro gracias a un cabezazo de Christian Gray.
La suspensión del partido, provocada por protocolos de seguridad en EE. UU. que exigen pausar eventos deportivos al aire libre ante relámpagos o truenos, dejó el partido en un empate 1-1, complicando aún más las chances del equipo argentino