Lionel Messi es una máquina de ganar premios. Luego de un fin de semana agitado, a despedida pura, antes de empezar sus merecidas vacaciones, el capitán de la Selección Argentina fue galardonado este lunes como el mejor futbolista extranjero de la Ligue 1 d Francia. Sí, aunque los hinchas de PSG se cansaron de menospreciarlo, la Pulga tuvo su merecido reconocimiento como pieza clave del equipo de Christophe Galtier.
El premio, como todos los que recolectó esta temporada mágica que incluyó la coronación en el Mundial de Qatar 2022, es lógico. Es que el PSG se consagró campeón y el argentino contribuyó con 16 goles y 16 asistencias en 32 partidos. Números nada despreciables.
Sin embargo, todo eso no alcanzó para que pudiera conquistar el corazón de los hinchas del equipo de la capital francesa, quienes no le perdonaron que no pudiera darles esa Champions League que se le niega sistemáticamente.
Así lo reconoció en la última entrevista a fondo que dio como jugador de PSG. "Desde el principio fue algo muy lindo el recibimiento. Después la gente empezó a tratarme diferente. Fue una parte del público del París porque la gran mayoría me seguía viendo y tratando como al inicio, pero sí hubo un quiebre con gran parte de la afición. No fue mi intención ni mucho menos, se dio así, anteriormente había pasado también con Mbappé y con Neymar. Sé que es su manera de actuar, pero me quedo con la gente que siempre me respetó, como yo siempre respeté a todo el mundo desde que llegué. Nada más, es una anécdota", contó en diálogo con la cadena BeIN Sports.
Y siguió: "Vine a París porque me gustaba el club, tenía amigos, mucha gente conocida dentro del vestuario, compañeros de Selección Argentina, compañeros que ya había conocido... Me parecía que más allá de lo que era el club iba a tener una adaptación más fácil que en cualquier otro lugar que pudiera ir. Sin embargo, fue una adaptación difícil, mucho más que lo esperado. Llegar tarde, no tener pretemporada, adaptarme al club, a una nueva manera de jugar, a la ciudad, que al principio costó".
El de la Ligue 1 no es el único reconocimiento que se lleva de su última temporada en Francia. Messi también quedó entre el 11 ideal del campeonato de acuerdo a la visión de la propia competencia. Lo mismo había hecho L'Equipe, el diario que se cansó de ponerle puntajes excesivamente bajos.
Ahora llegó el tiempo de descanso para Messi y su familia. Después de jugar en las despedidas de Maxi Rodríguez en Rosario y de Juan Román Riquelme en la Bombonera, el campeón del mundo se subió a su avión privado para iniciar sus vacaciones luego de una pequeña escala en Barcelona.
Será el momento para recargar pilas antes de desembarcar en Estados Unidos, donde en los primeros días de julio llegará para sumarse a las filas de Inter Miami, donde se espera que su debut se produzca el 21 de julio.
