Los Pumas no pudieron tomarse revancha y volvieron a caer frente a Inglaterra en su segundo test match de la ventana internacional. Esta vez fue por 22-17 en el estadio Bicentenario de San Juan, en un partido disputado, parejo y con final cerrado, pero que volvió a dejar al seleccionado argentino con sabor amargo.
Pese a una mejor versión respecto a la derrota en La Plata, el equipo dirigido por Felipe Contepomi no logró cerrar el partido a su favor. Sin embargo, la jornada tuvo un momento histórico: Pablo Matera se convirtió en el jugador con más presencias en Los Pumas, alcanzando las 111 camisetas albicelestes desde su debut en 2013. Recibió un homenaje especial en la previa del encuentro.
Inglaterra golpeó primero, Los Pumas reaccionaron
El equipo visitante no tardó en demostrar su jerarquía. Apenas a los 4 minutos del primer tiempo, Seb Atkinson rompió la defensa argentina tras un gran kick de George Ford y apoyó el primer try del encuentro. El propio Ford convirtió y puso el 7-0 parcial.
La respuesta argentina llegó con un penal convertido por Santiago Carreras, que achicó la diferencia a 7-3. Poco después, el inglés Ben Curry recibió tarjeta amarilla tras una infracción sobre Matera, dejando a su equipo con 14 hombres.
Los Pumas aprovecharon ese momento: Lucio Cinti apoyó el primer try argentino luego de una buena acción de Simón Benítez Cruz, y Carreras acertó la conversión para poner a los locales 10-7 arriba.
Eficacia inglesa y un final ajustado
Una vez restablecida la igualdad numérica, Inglaterra volvió a golpear. Freddie Steward apoyó un nuevo try tras un scrum profundo y Ford volvió a acertar con el pie para el 14-10.
En la segunda parte, ambos seleccionados mantuvieron un duelo físico y estratégico. Aunque Argentina siguió con actitud ofensiva, Inglaterra fue más eficaz en momentos clave y amplió la ventaja. A pesar de los intentos finales, el equipo nacional no logró revertir el marcador.