Un nuevo operativo policial volvió a poner el foco en las fiestas clandestinas en la ciudad de Salta. Durante la madrugada de este sábado, efectivos que realizaban tareas de prevención detectaron la realización de un evento no autorizado en un domicilio particular del barrio Villa Floresta, donde se encontraban reunidas alrededor de 50 personas y, además, se constató el cobro de entradas para ingresar.
La intervención se produjo en el marco de un patrullaje preventivo habitual que llevaba adelante personal de la Comisaría 4, con jurisdicción en la zona sudeste de la capital salteña. Al recorrer calle San Clemente, los uniformados advirtieron un movimiento inusual de personas, música a alto volumen y una importante concentración de vehículos estacionados en las inmediaciones de una vivienda, lo que llamó la atención del personal policial.
Al acercarse al lugar, los efectivos constataron que en el interior del inmueble se desarrollaba una fiesta sin ningún tipo de habilitación ni autorización correspondiente. En el domicilio había cerca de medio centenar de personas, en su mayoría jóvenes, y se comprobó que se estaba cobrando una suma de dinero en concepto de entrada, situación que agrava la infracción por tratarse de una actividad comercial encubierta.
Ante esta situación, se dio inmediata intervención a la Unidad Fiscal Contravencional, que tomó conocimiento de lo sucedido y dispuso las medidas a seguir. Siguiendo las directivas impartidas, se procedió al despeje ordenado de todas las personas que se encontraban en el lugar, priorizando que el procedimiento se desarrollara sin incidentes y resguardando la integridad tanto de los asistentes como del personal interviniente.
Como resultado del operativo, la propietaria del inmueble, una mujer de 54 años, fue debidamente infraccionada por incumplir la normativa vigente que regula la realización de eventos sociales y fiestas en domicilios particulares. Desde las fuerzas de seguridad remarcaron que este tipo de controles forman parte de un trabajo sostenido para prevenir situaciones que puedan derivar en disturbios, ruidos molestos, consumo excesivo de alcohol y otros riesgos asociados a encuentros masivos no habilitados.
En Salta, la realización de fiestas clandestinas continúa siendo una problemática recurrente, especialmente durante los fines de semana y en horarios nocturnos. Estos eventos suelen organizarse sin las mínimas condiciones de seguridad, sin controles sanitarios y sin autorización municipal, lo que representa un riesgo tanto para quienes asisten como para los vecinos de la zona.
Vecinos de Villa Floresta señalaron que no es la primera vez que se registran reuniones de este tipo en el barrio y manifestaron su preocupación por los ruidos, el tránsito y las posibles peleas o situaciones de violencia que suelen generarse cuando se realizan fiestas sin control. En este sentido, destacaron la importancia de los patrullajes preventivos y de la rápida respuesta policial ante este tipo de denuncias o detecciones.
Desde el ámbito de la seguridad, se recordó que los patrullajes preventivos cumplen un rol clave no solo en la prevención del delito, sino también en la detección temprana de infracciones contravencionales que alteran la convivencia social. La presencia policial en los barrios permite actuar de manera rápida y evitar que este tipo de eventos se prolonguen durante horas o escalen en situaciones más complejas.
Además, se insistió en que el cobro de entradas en una vivienda particular constituye una falta grave, ya que transforma una reunión privada en un evento de carácter comercial, el cual debe cumplir con requisitos específicos, como habilitación municipal, controles de seguridad, planes de evacuación y medidas de prevención, entre otros aspectos.
En la provincia de Salta, las autoridades vienen reforzando los controles sobre fiestas clandestinas, sobre todo en la capital y en zonas urbanas donde se concentran este tipo de encuentros. Los operativos suelen realizarse tanto a partir de denuncias de vecinos como mediante recorridos preventivos, como ocurrió en este caso en Villa Floresta.
La Unidad Fiscal Contravencional es la encargada de intervenir en este tipo de situaciones y de aplicar las sanciones correspondientes, que pueden incluir multas económicas y otras medidas previstas por la normativa vigente. Desde el organismo remarcaron la importancia de que los organizadores de eventos respeten las reglas, no solo para evitar sanciones, sino para garantizar la seguridad de todos.
Por último, desde la Policía de Salta reiteraron el pedido a la comunidad para que colabore dando aviso ante la realización de fiestas clandestinas o eventos no autorizados. La participación ciudadana, sumada al trabajo preventivo de las fuerzas de seguridad, resulta fundamental para mantener el orden, la tranquilidad y la convivencia en los distintos barrios de la ciudad.
El procedimiento en Villa Floresta se desarrolló sin mayores inconvenientes y finalizó con el despeje total del lugar, devolviendo la calma a la zona en plena madrugada. Un nuevo caso que vuelve a encender la alerta sobre una práctica que, pese a los controles y sanciones, continúa repitiéndose en distintos puntos de la ciudad de Salta.