El juicio por el brutal asesinato de Jimena Beatriz Salas, ocurrido en 2017 en la localidad de Vaqueros, transita sus últimas semanas en la Sala I del Tribunal de Juicio. Este lunes se escucharon testimonios importantes y se incorporaron informes periciales que aportan elementos significativos sobre la personalidad de los acusados. La Fiscalía los acusa como coautores de un homicidio agravado por ensañamiento, alevosía, criminis causa y femicidio.
Declararon tres peritos informáticos del CIF que trabajaron en la extracción de datos de celulares, chips y cámaras de seguridad. También testificó una perito de Gendarmería Nacional, y se incorporó por lectura la pericia psicológica realizada a Carlos Damián Saavedra. El informe lo describe como una persona impulsiva, manipuladora, sin empatía, y que evade responsabilidades. Según la profesional, proyecta una imagen de integridad que no condice con su verdadera personalidad.
Uno de los testimonios más fuertes fue el de un policía que trasladó a Javier Saavedra desde Tartagal a Salta en 2022. Relató que durante el viaje, a la altura de General Güemes, el detenido se abalanzó sobre él e intentó desviar el móvil policial hacia el carril contrario. Lograron reducirlo antes de que ocurriera una tragedia. El efectivo debió iniciar tratamiento psicológico tras el hecho.
La ronda de testimonios finalizará el 27 de octubre y el 28 se realizará una inspección ocular a los vehículos secuestrados. Los alegatos fueron fijados para el 6 y 7 de noviembre, y se espera que la sentencia se conozca antes de fin de año.
La causa mantiene en vilo a Salta, no solo por la brutalidad del crimen, sino también por el impacto social que generó. Jimena fue asesinada con saña en su casa de Vaqueros mientras sus hijas estaban presentes. La comunidad espera justicia luego de años de dolor, incertidumbre y una investigación compleja que, al parecer, comienza a cerrar su ciclo.
