La detención de Nicole, la adolescente de 16 años acusada de asesinar a su novio Santiago Nahuel López Monte, cerró una intensa búsqueda que se extendió durante casi tres días en distintos puntos del conurbano. La joven fue encontrada este viernes en una vivienda de La Matanza, donde se escondía desde la noche del crimen.
El operativo que permitió capturarla comenzó a tomar forma después de un allanamiento relacionado con su padre, Martín Ramón Vera, que actualmente cumple condena en la Unidad 40 de Lomas de Zamora. En ese procedimiento, la policía secuestró un teléfono celular cuyo contenido resultó clave: los datos permitieron identificar contactos y movimientos que llevaron directamente a la casa donde se refugiaba la adolescente.
Con esa información confirmada, los investigadores avanzaron con siete allanamientos en la zona y finalmente dieron con la joven. Fuentes judiciales indicaron que no se descarta investigar si hubo encubrimiento o colaboración por parte de adultos para facilitar la fuga.
Tras su detención, Nicole quedó a disposición de la Justicia. Se espera que sea indagada en las próximas horas y que luego sea trasladada a un instituto de menores, en el marco de una causa caratulada como “homicidio agravado por el vínculo”.
La noche del crimen y una coartada que se derrumbó
El asesinato ocurrió cerca de la medianoche del martes en Remedios de Escalada. De acuerdo con las primeras actuaciones, Nicole llamó al 911 intentando presentar la muerte de Santiago como un accidente doméstico. Esa versión duró poco: el SAME constató que el cuerpo del joven tenía heridas punzocortantes profundas, incompatibles con cualquier caída accidental.
Mientras se realizaban las pericias en la vivienda, la adolescente se escapó y desde entonces permaneció oculta. Los investigadores ya sospechaban que no había salido del conurbano, ya que dependía por completo de su entorno para moverse y encontrar alojamiento.
La casa donde fue finalmente detenida pertenece a un familiar directo. Vecinos comentaron que en los últimos días se había notado movimiento inusual en la propiedad, con personas que entraban y salían a horarios poco habituales. Esa información coincidió con los datos extraídos del teléfono del padre y aceleró la intervención policial.
Una relación marcada por la violencia
Mientras avanza la investigación, la familia de Santiago sostiene que el joven vivía una relación atravesada por la violencia. Su hermana, Macarena, relató que él solía volver con golpes, cortes y moretones que trataba de disimular. También señaló que la adolescente ejercía un control constante, con episodios de manipulación y agresiones que terminaron deteriorando por completo el vínculo.
Vecinos del barrio describieron situaciones similares: conflictos frecuentes, discusiones en la vía pública y destrucción de objetos personales de Santiago, como sus celulares o su moto, cada vez que intentaba distanciarse.
A pesar de ese entorno conflictivo, el adolescente había decidido convivir con ella, aunque según sus allegados, cada vez estaba más aislado y angustiado.
Lo que viene en la causa
Con la captura de Nicole, la Justicia se concentra ahora en reconstruir con precisión cómo se produjo el homicidio, si hubo planificación y quiénes la ayudaron a mantenerse oculta durante casi tres días. También se ordenaron pericias psicológicas y psiquiátricas para evaluar su situación personal y su grado de comprensión al momento del hecho.
La familia de Santiago pidió que el proceso avance con celeridad y que se esclarezca completamente el rol de cada involucrado. Para ellos, la detención representa apenas un primer paso en un camino que recién empieza y que exige respuestas claras sobre un crimen que dejó a un adolescente sin futuro y a todo un entorno sumido en el dolor.
La investigación continuará durante los próximos días con nuevas declaraciones, pericias y análisis de pruebas que buscarán establecer cada detalle de una historia que conmocionó a todo el país.