El calor de la primavera no solo trae días más largos y movimiento en las calles salteñas. También, y cada vez con más fuerza, viene acompañado de un aumento en los accidentes por mordeduras y picaduras de animales ponzoñosos. En lo que va del 2025, más de mil personas fueron atendidas en hospitales y centros de salud de Salta por ataques de perros, alacranes, arañas y serpientes, en una tendencia que preocupa a las autoridades sanitarias.
Uno de los datos más relevantes es el de las 602 mordeduras de perros con riesgo potencial de rabia, ya que se trata de animales cuyo estado de vacunación es desconocido. Estos casos obligan a aplicar el protocolo de atención antirrábica, debido a la gravedad de una posible infección. El problema se concentra en zonas con presencia de perros callejeros o mascotas no vacunadas, lo que refleja la necesidad de una campaña más intensa y sostenida en todo el territorio provincial.
El panorama se agrava al sumar otros ataques: 333 personas sufrieron picaduras de alacrán, la mayoría dentro de sus propias viviendas. Si bien los sueros están disponibles en la capital y en ciudades principales, el riesgo persiste, especialmente en barrios con humedad, basura o acumulación de escombros. A esto se suman 489 mordeduras de arañas, algunas de ellas de especies venenosas, lo que obliga a mantenerse alerta en ambientes cerrados y poco ventilados.
Otro foco de preocupación es el ofidismo, es decir, las mordeduras de serpientes. Hasta septiembre, se contabilizaron 56 casos en toda la provincia, principalmente en los departamentos de Anta y Orán, donde abundan ejemplares de yarará, cascabel y coral, todas con capacidad de provocar cuadros graves si no se actúa rápido. El sistema de salud cuenta con sueros específicos y protocolos de traslado urgente, aunque especialistas insisten en que la prevención es clave para evitar desenlaces trágicos.
Las autoridades provinciales remarcan que la mayoría de estos accidentes pueden prevenirse. Vacunar a perros y gatos, evitar la acumulación de basura, limpiar terrenos baldíos y acudir rápidamente al médico ante cualquier mordedura o picadura son medidas básicas que pueden salvar vidas. También es fundamental extremar los cuidados al circular por zonas rurales, usar calzado adecuado y revisar la ropa o el calzado antes de usarlo, especialmente en viviendas cercanas al monte o áreas rurales.
El crecimiento urbano desordenado, la falta de controles en algunas zonas del interior y la escasa conciencia sobre estos riesgos favorecen un contexto propicio para la aparición de estos casos. Desde el área de salud, insisten en que la tarea es compartida: Estado, municipios y vecinos deben trabajar en conjunto para reducir el impacto de estos accidentes que, en muchos casos, pueden evitarse con acciones simples.
Cifras clave 2025 en Salta
- 602 accidentes potencialmente rábicos (mordeduras de perros sin esquema de vacunación conocido).
- 333 picaduras de alacrán registradas.
- 489 mordeduras de araña notificadas.
- 52 mordeduras de yarará.
- 3 mordeduras de cascabel.
- 1 mordedura de coral.