Hace 42 años, cuando llegó por primera vez al campanario de la Catedral Basílica, Pepe Fernández ni imaginaba que allí iban a pasar tantos años y emociones.
Con mucha nostalgia Pepe recordó,cuando subía corriendo las escaleras al campanario en aquellas épocas. Hoy le cuesta un poco más y reflexiona que se retira feliz y sano sobre todo. Doy las gracias a Dios de que así sea".
Este jueves en la Noche del Peregrino, Fernández estará a cargo del Concierto de Campanas, que comenzará a las 23.15 y se extenderá hasta la medianoche y el viernes el andar de las campanas quedará en manos del equipo que sigue sus pasos y Pepe se despedirá del campanario del Milagro realizando la lluvia de pétalos que cierra esta fiesta.
Pepe Fernández, a lo largo de estos 42 años, vio pasar a cientos de chicos que quisieron sumarse al aprendizaje de hacer sonar las campanas. Para trabajar en el campanario, los voluntarios que forman parte de este grupo se organizan en turnos. El protagonismo de las campanas en la época del Milagro es fundamental.
Desde el día de la entronización del Señor y la Virgen del Milagro las campanas son las encargadas de hacer el llamado a la novena, a lo que se suma la tarea de siempre -el cambio de hora, llamado de misa y oración- y finalmente, el Triduo es la franja de días en los que más se trabaja con la llegada de cada una de las agrupaciones de peregrinos y la gran fiesta del 15, el día de la procesión.