Momentos de tensión se vivieron al caer la tarde en el barrio Los Castaños, una pequeña zona residencial de solo dos manzanas, al sur de la ciudad de Salta. Un poste de alumbrado público cayó sobre el ingreso de una vivienda situada en la esquina de las calles Roberto Romero y La Voz del Comanche, generando daños materiales y un reclamo por parte de la vecina afectada.
Según relató la propietaria de la vivienda, el hecho se produjo cuando operarios de una empresa de cable estaban realizando tareas en el poste, el cual también es utilizado por la empresa distribuidora de energía eléctrica EDESA. “Estaban trabajando y de repente el poste se ladeó hacia mi casa. Si no estaba la reja, caía directamente sobre la puerta”, explicó la mujer.
La estructura, de grandes dimensiones y visiblemente deteriorada en su base, terminó golpeando la entrada principal del domicilio. Como consecuencia del impacto, la puerta ya no puede abrirse con normalidad, lo que podría indicar un daño estructural más serio. “Me dijeron que van a venir hoy por la mañana a solucionarlo, anoche no pudieron hacer nada porque el poste es muy pesado”, agregó.
De acuerdo al testimonio de la vecina, los operarios intentaron remover el poste tras el incidente, pero al no contar con los medios adecuados para hacerlo, decidieron abandonar la tarea hasta el día de hoy. La caída del poste habría sido provocada por el mal estado de la base, aparentemente podrida, lo que derivó en el colapso de la estructura apenas se apoyó la escalera para trabajar.
La situación generó preocupación entre los habitantes del barrio, quienes también reclamaron mayor control y mantenimiento de las instalaciones eléctricas y de telecomunicaciones en la zona. “Esto pudo haber sido una tragedia. Si alguien pasaba por ahí en ese momento, no la contaba”, dijo otro vecino.
Ahora se espera que tanto la empresa de cable como EDESA -que comparten el uso del poste caído- asuman la responsabilidad por los daños ocasionados. La vecina afectada evalúa además realizar una presentación formal para exigir que se repare la estructura de su vivienda y se garantice la seguridad de que todo quedará en condiciones como estaba.
El hecho pone en evidencia la necesidad de una revisión periódica del estado de los postes y redes en los barrios periféricos de la capital salteña.