La última gala de MasterChef Celebrity dejó una escena que rápidamente se convirtió en tema de conversación en redes sociales y medios de espectáculos. Wanda Nara, conductora del reality, decidió interrumpir la rutina culinaria para indagar directamente en la vida personal de Ian Lucas, uno de los participantes más jóvenes y carismáticos del certamen. El blanco de su curiosidad fue la relación que el youtuber mantiene con Evangelina Anderson, modelo y también participante del programa, con quien se lo ha visto compartir complicidad dentro y fuera del set.
Todo comenzó cuando Lucas mencionó casualmente que suele encontrarse con Maxi López, exmarido de Wanda, y que en ocasiones Evangelina se suma a esos encuentros. Esa simple referencia encendió las alarmas de la conductora, que no dudó en aprovechar el momento para ponerlo contra las cuerdas. Con tono pícaro y sonrisa desafiante, Wanda lanzó la pregunta que nadie esperaba: “¿Hubo algo entre vos y Evangelina?”. La reacción de Lucas fue inmediata: un silencio prolongado, acompañado de un gesto cómplice hacia Anderson, que estaba cocinando a su lado.
La tensión se mezcló con risas nerviosas y miradas que parecían decir más que las palabras. Anderson, por su parte, se mostró divertida y esquiva, sin confirmar ni desmentir nada. Fue entonces cuando Wanda, fiel a su estilo directo, remató la situación con una confesión que dejó a todos boquiabiertos: “Me gustan las mujeres que saben”. La frase, cargada de doble sentido, fue interpretada como un guiño hacia Evangelina y como un reconocimiento a su seguridad y experiencia.
Este episodio no solo reavivó los rumores de romance entre Lucas y Anderson, sino que también expuso la habilidad de Wanda para generar momentos televisivos que trascienden la cocina. La diferencia de edad entre el influencer y la modelo, la reciente separación de Anderson de Martín Demichelis y los consejos amorosos que Lucas asegura recibir de Maxi López son ingredientes que alimentan la especulación. En redes sociales, los seguidores del programa debatieron intensamente: algunos celebraron la espontaneidad de Wanda, mientras otros criticaron la incomodidad que pudo haber generado en los participantes.