La noticia de la separación entre Roberto García Moritán y Priscila Crivocapich sorprendió al mundo del espectáculo argentino. La periodista había confirmado días atrás el final de la relación, dejando entrever cierta desilusión por cómo se dieron los hechos. Frente a la repercusión mediática, el exmarido de Pampita decidió dar su versión y explicar cómo atraviesa este nuevo capítulo de su vida.
En declaraciones televisivas, Moritán fue directo: “Las cosas no salieron como pensábamos, nada más”. Con esas palabras buscó transmitir serenidad y evitar dramatizar la ruptura. Según él, la decisión se tomó en buenos términos y fue el resultado de conversaciones previas, sin sorpresas ni conflictos mayores. “Era algo que ya veníamos conversando hace unos días. Sin sorpresas”, agregó, intentando dejar en claro que no hubo un quiebre abrupto ni situaciones traumáticas.
La relación entre Moritán y Crivocapich había comenzado meses atrás y, aunque se especuló con un posible casamiento, finalmente no prosperó. Versiones cercanas señalaron que las diferencias en proyectos personales, como la maternidad, habrían sido un punto de tensión. Sin embargo, el economista evitó profundizar en esos aspectos íntimos y prefirió destacar que la periodista “no es el tipo de persona que habla mal a las espaldas de otro”, desmintiendo supuestos dichos negativos que se le atribuyeron.
En paralelo, la separación abrió la puerta a nuevos rumores: un posible vínculo con Gisela Dulko, extenista y figura pública. Consultado al respecto, Moritán fue categórico: “No hay nada con Gisela, no estoy en pareja”. Con esa frase buscó despejar especulaciones y reafirmar que, por el momento, su foco está puesto en recomponer su vida personal tras la ruptura.