A casi dos meses de la gran final de La Voz Argentina, un nuevo escándalo sacudió el mundo del espectáculo y puso a Soledad Pastorutti en el centro de la polémica. Todo comenzó cuando Vanesa Carbone, exvedette y esposa del exfutbolista Lucho González —quien participó en la última edición del reality musical—, lanzó en redes sociales un fuerte comentario insinuando que la artista había intentado seducir a su marido durante las grabaciones del programa. La acusación generó un revuelo inmediato y obligó a la intérprete de Arequito a dar su versión de los hechos.
Con la serenidad que la caracteriza, Soledad enfrentó las versiones en una entrevista para Puro Show (El Trece). Allí, la cantante expresó: “No sé qué flasheó, nada me sorprende en este mundo de hoy”, dejando en claro que no se siente intimidada por rumores ni especulaciones. Además, relató cómo se enteró de la acusación: estaba junto a su marido cuando recibió la noticia y ambos reaccionaron con incredulidad. “Me sorprendió el nivel de exposición que se le dio a algo tan absurdo”, agregó, subrayando que su vida privada y profesional siempre se han manejado con respeto.
La Sole, como la llaman sus seguidores, también destacó que su relación con los participantes del programa siempre fue de acompañamiento y guía artística, nunca de índole personal. En ese sentido, remarcó que su rol como coach en La Voz Argentina se basa en potenciar las cualidades de los concursantes y brindarles herramientas para crecer en la música, sin que exista ningún tipo de interés más allá de lo profesional.
Por su parte, Carbone había insinuado que Pastorutti se mostraba demasiado cercana a González durante los meses de grabación, lo que despertó su enojo y la llevó a publicar mensajes en redes sociales. Sin embargo, la respuesta de la cantante fue contundente: no tiene nada que ocultar y no teme a las habladurías. Con su estilo directo, dejó claro que no permitirá que rumores infundados manchen su trayectoria ni su vida personal.
