Wanda Nara volvió a estar en el centro de la escena mediática, esta vez por una escapada turística que terminó en escándalo. Luego de finalizar las primeras grabaciones de MasterChef Celebrity, la empresaria y conductora decidió tomarse unos días de descanso junto a sus hijas en Misiones. El destino elegido fue el Parque Nacional Iguazú, donde compartió una serie de fotos que rápidamente se viralizaron por un detalle que no pasó desapercibido: la pasarela de acceso a la Garganta del Diablo fue cerrada exclusivamente para ella, sus hijas y su pareja, Martín Migueles.
En sus redes sociales, Wanda publicó imágenes en las que se la ve caminando por los senderos del parque sin presencia de otros turistas. En una de las postales más comentadas, sus hijas —fruto de su relación con Mauro Icardi— aparecen de espaldas contemplando la imponente caída de agua, en total privacidad. “Un sueño cumplido con ellas”, escribió la conductora, acompañando la publicación con emojis de corazones y arcoíris.
La revelación generó una ola de críticas en redes sociales, donde muchos usuarios cuestionaron el privilegio de cerrar un espacio público para uso exclusivo. Algunos señalaron que se trató de una muestra de ostentación innecesaria, mientras que otros defendieron la decisión como parte de un protocolo especial para figuras públicas. “Siempre VIP”, “Ni la naturaleza se salva del marketing”, fueron algunos de los comentarios que circularon en plataformas como X e Instagram.