En la noche del 18 de julio de 2025, durante la inauguración del Festival Nacional del Tamal y Encuentro de la Doma en Chicoana, Las Voces de Orán regresaron a los escenarios por primera vez tras la partida de Federico Córdoba, su líder emblemático, quien falleció el 4 de julio a los 73 años tras una dura lucha con una enfermedad oncológica.
El momento fue cargado de emoción: su hijo Ricardo “Ricky” Córdoba tomó el micrófono para continuar el legado familiar con respeto y continuidad. El público respondió con fuertes aplausos, algunas lágrimas y una comunión emotiva con el espíritu que dejó su padre.
Durante la ceremonia, el Escuadrón Gaucho Coronel Luis Burela impulsó que el escenario central del festival lleve el nombre de Federico Córdoba, acompañando el anuncio con una placa conmemorativa en honor a su trayectoria.
Este regreso de Las Voces de Orán al escenario en el marco del Festival del Tamal representó mucho más que un espectáculo folclórico: fue una reafirmación del vínculo emocional entre la música, una comunidad y la figura de quien supo llevar el canto salteño a todos los rincones del país.
Duelo y memoria salteña
La noticia de su fallecimiento provocó un profundo impacto en San Ramón de la Nueva Orán y en toda la provincia. La Municipalidad declaró tres días de duelo oficial, con bandera a media asta en edificios públicos y suspensión de actos oficiales como muestra de respeto por su influencia cultural.
Miles de oranenses acompañaron la caravana fúnebre recorriendo la ciudad al ritmo de guitarras, aplausos y coplas populares. El gobernador Gustavo Sáenz se sumó al homenaje institucional en un gesto que reflejó el reconocimiento de Salta hacia quien fue un referente del folklore norteño
Federico Córdoba fundó Las Voces de Orán en 1969, junto a Martín Zalazar y Roberto Franco. En 1972, lograron su consagración nacional al ganar el prestigioso Festival de Cosquín con “Chaya de los pobres”. Su repertorio incluyó clásicos como “Cuando me acuerdo de Salta”, “Amar es un verbo triste” y “El verde se llama Orán”, temas que confluyeron vida, identidad regional y pasión popular
En los últimos tiempos, su estado de salud lo obligó a dar paso a su hijo Ricky, quien asumió el micrófono durante su tratamiento y ahora encabeza el trío con el compromiso de sostener el legado familiar.