La violencia que empañó el partido entre Independiente y Universidad de Chile por los octavos de final de la Copa Sudamericana sigue generando repercusiones. Esta vez, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) emitió un comunicado en el que expresó su repudio y exigió sanciones ejemplares contra los responsables de los incidentes ocurridos en Avellaneda.
El organismo brasileño reclamó que se actúe con “total rigurosidad en la investigación de los hechos” y que quienes hayan protagonizado los episodios violentos sean “identificados y severamente castigados”.
En su mensaje, la CBF sostuvo que lo ocurrido “contradice todos los principios del deporte” y calificó lo sucedido como un acto de barbarie. “El fútbol, una de las mayores expresiones de pasión y unidad del pueblo sudamericano, no puede ser escenario de violencia, intolerancia e irrespeto”, enfatizó.
La entidad también manifestó su solidaridad con las víctimas y sus familias, al remarcar que ningún hincha, deportista o trabajador del espectáculo deportivo debe temer por su integridad física al presenciar un partido.
Finalmente, el comunicado reafirmó el compromiso de la CBF con un fútbol “seguro, inclusivo y pacífico” y subrayó que solo con sanciones ejemplares y acciones concretas será posible erradicar la violencia en los estadios y preservar la dignidad del deporte en Sudamérica.