Gimnasia y Tiro ratificó su rumbo institucional y deportivo con la reelección de Marcelo Mentesana como presidente del club. En los comicios realizados este viernes, el dirigente se impuso con una amplia diferencia y continuará al frente de la institución por los próximos dos años, consolidando un liderazgo que ya lleva varias etapas consecutivas.
La lista oficialista Celeste y Blanca obtuvo alrededor del 80% de los votos, superando con comodidad a la propuesta opositora Todos Juntos. El resultado reflejó un respaldo claro de los socios a la conducción actual y al proyecto que viene desarrollándose en los últimos años dentro del histórico club salteño.
En números concretos, Mentesana cosechó 369 votos contra los 103 de la lista encabezada por Ximena Dávalos Santamaría. De este modo, el dirigente renovó su mandato por séptima vez consecutiva, un dato que expone la continuidad política y el peso que tiene su figura dentro de la vida institucional de Gimnasia y Tiro.
La jornada electoral se desarrolló con normalidad en la sede social, entre las 10 y las 18, y contó con un padrón superior a los 1.500 socios habilitados. Sin embargo, uno de los aspectos que dejó la elección fue la baja participación: votaron menos de 500 socios, una cifra menor si se la compara con el buen presente que atraviesa el club tanto en lo institucional como en lo deportivo.
Más allá de la concurrencia, el resultado no sorprendió. Gimnasia y Tiro transita una etapa de orden administrativo y previsibilidad económica, con cuentas claras y una estructura que logró sostenerse en el tiempo. Esa estabilidad fue uno de los argumentos que terminó inclinando la balanza a favor del oficialismo.
En el marco de la asamblea, además, fue aprobado el balance del último ejercicio económico, que arrojó un superávit superior a los 250 millones de pesos. El dato no pasó desapercibido en el contexto del fútbol argentino, especialmente en las categorías del ascenso, donde la mayoría de los clubes lidia con déficits crónicos y dificultades financieras.
De cara al nuevo período, el desafío para la dirigencia no será menor. La continuidad del proyecto exige sostener el equilibrio entre lo económico y lo deportivo, sin comprometer la estabilidad alcanzada. En ese sentido, uno de los objetivos centrales será profundizar el desarrollo de las distintas disciplinas que forman parte de la identidad histórica de Gimnasia y Tiro.
En el plano futbolístico, la atención estará puesta en la conformación del plantel que afrontará la próxima temporada de la Primera Nacional. Se trata de una categoría exigente, extensa y costosa, donde la planificación y el control presupuestario resultan determinantes. La idea será mantener a Gimnasia como un equipo competitivo, capaz de sostener protagonismo sin perder el orden que hoy distingue a la institución.
Con la reelección de Mentesana, el club del barrio Vicente López apuesta nuevamente a la continuidad, con la expectativa de consolidar lo conseguido y proyectar un crecimiento sostenido en un escenario complejo para el fútbol del interior.