MÁS DE ECONOMÍA



Economía

La canasta navideña subió un 27% en 2025

La canasta navideña en Argentina escaló un 27% respecto a 2024, pero los descuentos y planes de pago se convierten en aliados clave para los consumidores salteños.

La canasta navideña subió un 27% en 2025

En Salta, como en todo el país, la Navidad llega con un sabor agridulce para las familias que ya sienten el peso de los aumentos en los productos típicos de las fiestas.

 

La canasta navideña, esa selección de indispensables para la mesa del 24 y el 31, pegó un salto del 27% comparado con el año pasado, pasando de un promedio de 75 mil pesos a más de 95 mil. Pero no todo es mala noticia: las promociones y descuentos están siendo el salvavidas para muchos, permitiendo que la tradición siga viva sin tanto sacrificio.

Si miramos el rubro de la decoración, que tanto alegra las casas salteñas en estas fechas, el incremento fue más moderado, apenas un 12% interanual. Sin embargo, hay contrastes que llaman la atención: los pesebres completos, esos con nueve piezas que no pueden faltar en un hogar norteño, subieron un 28%, mientras que las luces LED cálidas aumentaron un 27% y las guirnaldas un 18%. Parece que la magia navideña cuesta un poco más este año, pero la creatividad local siempre encuentra formas de adornar con lo que hay a mano.

Pasando a lo que realmente llena la panza, los alimentos festivos lideran los aumentos con cifras que duelen. La torta española con frutos secos, un clásico en las mesas argentinas, trepó un 47%, seguida de cerca por el pan dulce con frutas que subió un 44% y el turrón blando de almendras con un 38%. En el otro extremo, hay opciones más accesibles como el pan dulce con chips de chocolate que solo aumentó un 9%, las garrapiñadas un 7% y hasta el champagne que apenas creció un 1%. En Salta, donde las tradiciones gastronómicas se mezclan con influencias regionales, estos precios invitan a buscar alternativas caseras o proveedores locales.

Muchos de estos saltos en los precios se explican por el origen de los productos: dos de los tres que más subieron son importados, golpeados por el vaivén del dólar y la escasez de stock en el mercado. En cambio, la mayor apertura comercial ha ayudado a moderar los valores en la decoración, permitiendo que artículos como bolas y estrellas navideñas no se disparen tanto. Para los salteños, que valoran el ingenio en tiempos duros, esto significa priorizar lo nacional y aprovechar ferias artesanales para no renunciar al espíritu festivo.

Lo que realmente marca la diferencia este fin de año son las estrategias de los consumidores argentinos, especialmente en regiones como el norte donde el presupuesto familiar es sagrado. Un abrumador 74% pone el foco en los descuentos, mientras que un 9% busca cuotas sin interés y un 7% prefiere beneficios por pagos con débito o QR. En Salta, donde el efectivo sigue siendo rey en muchos barrios, estas opciones digitales ganan terreno para estirar el sueldo hasta las fiestas.

Además, el financiamiento juega un rol central: el 61% de la gente opta por pagar con tarjeta de crédito, dividiendo el gasto en cuotas manejables, y un 16% espera ansioso el aguinaldo para cubrir lo esencial. En un contexto de economía ajustada, estos hábitos reflejan cómo los argentinos nos adaptamos, buscando equilibrar el placer de la celebración con la realidad del bolsillo.

Finalmente, el panorama navideño en Argentina muestra un mercado más maduro y competitivo, donde las promociones y planes de pago serán decisivos para mantener el consumo en pie. En Salta, con su calidez comunitaria, las familias seguirán reuniéndose alrededor de la mesa, quizás con un poco menos de lujo pero con el mismo cariño, demostrando que la Navidad va más allá de los precios y se trata de compartir lo que realmente importa.

 


¿Te gustó la noticia? Compartíla!