Nada más tentador que una merienda bien argentina, con la mesa servida de dulzuras caseras y el aroma de comida casera recién hecha. Entre mates, charlas y algo rico para compartir, pocas cosas conquistan tanto como una preparación clásica que se roba todas las miradas.
En este caso, la magia está en animarse a darle una vuelta de rosca a un tradicional rogel, pero con un detalle que lo cambia todo: utilizar tapas de empanadas como base. Un recurso sencillo, económico y al alcance de cualquiera, que transforma la preparación en una receta exprés sin perder el encanto de lo casero.
El resultado es un postre de capas crocantes, dulce de leche en abundancia y un merengue suave y dorado que corona la preparación. Una combinación perfecta entre practicidad y sabor, que permite disfrutar de un clásico argentino sin complicaciones, logrando un final que sorprende en cada bocado.
Ingredientes para el rogel exprés
Para base y relleno
- 12 tapas de empanadas (criollas, hojaldradas o las que prefieras)
- 500 gramos de dulce de leche repostero
- 3 claras de huevo
- 200 gramos de azúcar
- 1 taza de agua
Para merengue de decoración
- 3 claras de huevo
- 200 gramos de azúcar
- 60 ml de agua
- Unas gotas de jugo de limón o esencia de vainilla para perfumar (opcional)
Preparación del rogel con tapas de empanadas
1. Hornear las tapas
- Precalentar el horno a 180 °C.
- Colocar las tapas de empanadas en una placa y pincharlas con un tenedor para que no se inflen.
- Cocinarlas de 5 a 7 minutos hasta que estén doradas y crocantes.
- Retirar y dejar enfriar.
2. Armar el rogel
- Sobre una base, colocar la primera tapa cocida y cubrir con una capa generosa de dulce de leche.
- Repetir el proceso intercalando tapa y dulce de leche hasta terminar con todas.
- Reservar en frío mientras se prepara el merengue.
3. Preparar el merengue italiano
- Colocar el azúcar y el agua en una ollita, y llevar a fuego medio hasta lograr un almíbar en punto bolita blanda (118 °C aprox.).
- Mientras tanto, batir las claras a punto nieve.
- Sin dejar de batir, incorporar en forma de hilo el almíbar caliente.
- Seguir batiendo hasta obtener un merengue firme, brillante y estable.
4. Decorar y servir
- Cubrir toda la superficie del rogel con el merengue, usando espátula o manga.
- Dorar con soplete de cocina o unos minutos en horno fuerte.
- Dejar enfriar y servir en porciones.
Tips de cocción
- Horneado de las tapas: vigilá que no se quemen; con 5-7 minutos suele ser suficiente, dependiendo del horno.
- Punto del almíbar: para el merengue, es clave que alcance el punto bolita blanda (118 °C) para lograr firmeza sin que quede arenoso.
- Enfriado: dejá que las tapas y el rogel armado enfríen antes de poner el merengue, así evitás que se derrita.
Alternativas de decoración
- Merengue italiano: dorado con soplete, como clásico rogel.
- Merengue francés: más rápido, batido con azúcar, ideal si no tenés almíbar.
- Crema chantilly: para una versión más cremosa y suave.
- Frutas o chocolate: frutillas, cacao en polvo o hilos de chocolate para un toque gourmet.
- Almendras o nueces: espolvorear sobre el merengue para textura y presentación.
Guardado y conservación
- Refrigeración: mantener tapado en heladera hasta 3-4 días; el dulce de leche humedece las tapas, haciendo que queden suaves pero deliciosas.
- No se recomienda congelar armado, pero las tapas solas pueden guardarse en freezer hasta 1 mes.
- Servir: sacar del refrigerador 10 minutos antes de cortar para que el dulce de leche esté más cremoso.