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ESCÁNDALO EN MÉXICO

Policías son filmados teniendo sexo en plena calle y estalla la polémica

El video se viralizó y desató una ola de indignación, memes y un fuerte debate sobre la privacidad y la ética pública.

Policías son filmados teniendo sexo en plena calle y estalla la polémica

En pleno corazón de la Ciudad de México, dos agentes de la policía protagonizaron una escena que rápidamente se convirtió en tendencia en redes sociales. El video de más de dos minutos muestra a un policía y una oficial manteniendo relaciones sexuales dentro de una patrulla estacionada, a plena luz del día y en un espacio público.

La imagen de la mujer, perfectamente identificable, circuló sin filtro por plataformas como X (ex Twitter), donde se multiplicaron los comentarios, memes y reacciones virales. Mientras algunos usuarios expresaron su repudio por el uso indebido del vehículo oficial en horario de servicio, otros cuestionaron la exposición pública y la filtración del material, que fue grabado sin consentimiento.

La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC-CdMx) no tardó en pronunciarse. En un comunicado, dejó en claro que no tolerará “ningún acto contrario a los protocolos policiales ni a los principios institucionales”. Además, informó que los dos agentes involucrados ya fueron identificados y que la Dirección General de Asuntos Internos abrió una investigación administrativa.

Aunque aún no se ha definido la sanción, medios locales como Milenio señalan que las consecuencias podrían incluir multas o incluso trabajo comunitario por un máximo de 24 horas. Los agentes serán citados a declarar en los próximos días.

Más allá del reproche por el comportamiento inapropiado, el caso abrió un nuevo frente: ¿fueron víctimas de un delito quienes fueron grabados sin permiso? Para varias especialistas en derecho digital, la respuesta es sí.

La abogada Valeria Mondragón explicó que, si bien los agentes cometieron una falta administrativa al tener sexo durante su turno, la difusión del video los convierte en víctimas de un delito contemplado en la Ley Olimpia, que protege la intimidad sexual frente a la violencia digital.

En la misma línea, Ninde Molre, abogada y activista de México Igualitario, subrayó que “aunque se trate de servidores públicos, eso no justifica el escarnio ni la exposición mediática de su vida privada”. Y agregó: “Lo grave aquí no es solo la falta, sino la violencia digital y los ataques, en especial hacia la mujer policía, que fue blanco de comentarios misóginos y burlas”.

Por lo pronto, ambos agentes siguen en funciones, a la espera de lo que determine la investigación interna. No se descarta que presenten denuncias contra quienes grabaron y difundieron el video, lo que podría derivar en procesos judiciales por violación a la intimidad.

Mientras tanto, la discusión continúa viva en redes y medios. Hay quienes piden sanciones ejemplares para los agentes y otros que denuncian una caza de brujas mediática con tintes de doble moral.

Lo cierto es que esta historia combina todos los ingredientes para volverse viral: sexo, uniforme, escándalo público, redes sociales y una sociedad dividida entre la indignación y la defensa de la privacidad.


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