Donald Trump volvió a arremeter contra artistas que expresaron su apoyo a la vicepresidenta Kamala Harris durante la campaña presidencial de 2024. En una serie de mensajes difundidos en su red Truth Social, el presidente de Estados Unidos denunció sin evidencias que varias figuras de la música podrían haber recibido pagos a cambio de sus respaldos públicos.
Trump apuntó directamente contra Bruce Springsteen, a quien acusó de recibir dinero “por su pobre desempeño durante la campaña presidencial de Harris”, y preguntó: “¿No es eso una contribución de campaña importante e ilegal?”. Además, sembró sospechas sobre los apoyos que Harris recibió de Beyoncé y Oprah Winfrey, insinuando que también fueron pagos encubiertos “bajo la apariencia de entretenimiento”.
El mandatario anunció que va a “pedir una gran investigación sobre este asunto” y tildó de “desesperado” y “no legal” el supuesto intento de “inflar artificialmente las escasas multitudes” que habrían acompañado a Harris durante su campaña. “Son corruptos, antipatrióticos”, escribió refiriéndose a los artistas involucrados.
La escalada comenzó la semana pasada cuando Bruce Springsteen criticó duramente a Trump en un recital en Manchester. Desde el escenario, el músico dijo: “Mi hogar, los Estados Unidos que amo, que han sido un faro de esperanza y libertad durante 250 años, está actualmente en manos de una administración corrupta, incompetente y traidora”. En ese mismo concierto, acusó al gobierno republicano de “perseguir a personas por ejercer su derecho a la libertad de expresión”, de “abandonar a los niños más pobres del mundo a la enfermedad y la muerte” y de “deportar a residentes sin el debido proceso legal a centros de detención y prisiones extranjeras”.
Trump respondió con una serie de insultos personales. Calificó a Springsteen como “más tonto que una piedra”, “imbécil prepotente”, “reseco como una pasa” y “no es un tipo con talento”. En uno de sus posteos escribió: “Nunca me gustó, nunca me gustó su música ni su política de izquierda radical y, lo que es más importante, no es un tipo con talento. Solo un imbécil prepotente y desagradable que apoyó fervientemente al corrupto Joe Biden, un idiota mentalmente incompetente”.
También amenazó: “Este rockero reseco como una pasa (¡tiene la piel toda atrofiada!) debería mantener la boca cerrada hasta que regrese a este país. Eso es lo normal. Entonces veremos qué tal le va”.
Aunque no la mencionó en sus últimas publicaciones, Trump ya había cargado contra Taylor Swift. En febrero, tras el Super Bowl, dijo que “la única que tuvo una noche peor que los Kansas City Chiefs fue Taylor Swift”, cuando fue abucheada por parte del público. La semana pasada escribió: “¿Alguien notó que, desde que dije ‘odio a Taylor Swift’, ya no está ‘hot’?”, en una crítica sin contexto aparente, ya que la cantante no había hecho comentarios recientes.
En otro tramo de sus declaraciones, Trump incluyó a Bono entre los señalados, a pesar de que el cantante irlandés no apoyó públicamente a Harris, aunque recibió una Medalla Presidencial de la Libertad en enero de parte del presidente Biden, dos semanas antes del cambio de mando presidencial.
