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Situación judicial y sanitaria

Internaron a Milagro Sala en un hospital público de La Plata

La dirigente social fue ingresada en el Hospital San Roque de Gonnet en el marco de su arresto domiciliario.

Internaron a Milagro Sala en un hospital público de La Plata

El estado de salud de Milagro Sala volvió a quedar en el centro de la escena tras su internación en un hospital público de la ciudad de La Plata. La dirigente social fue ingresada el sábado por la tarde en el Hospital San Roque de Gonnet, donde permanece bajo atención médica, en un contexto atravesado por su situación judicial y el cumplimiento del arresto domiciliario con monitoreo electrónico.

El ingreso al centro de salud se produjo cerca de las 15.30 y se manejó con un marcado hermetismo tanto desde el ámbito sanitario como judicial. La internación se dio pocos días después de que la Justicia autorizara el cambio de domicilio de Sala dentro de la misma localidad, luego del vencimiento del contrato de alquiler de la vivienda en la que residía desde 2023.

La mudanza había sido presentada como una necesidad urgente ante la intimación del propietario del inmueble anterior, que incluso había advertido sobre la posibilidad de iniciar acciones legales. En ese contexto, la defensa de Sala solicitó fijar un nuevo domicilio para evitar que la falta de una residencia válida pusiera en riesgo la continuidad del arresto domiciliario. La autorización judicial permitió que la dirigente social se instalara en una vivienda de Gonnet, a pocas cuadras del hospital donde ahora se encuentra internada.

La situación sanitaria no resulta ajena al expediente. En meses recientes, Sala había atravesado un cuadro médico complejo que incluyó una internación en terapia intensiva por una trombosis venosa profunda en una de sus piernas. Ese antecedente reforzó los argumentos vinculados a la necesidad de controles médicos periódicos y seguimiento clínico constante, puntos que fueron centrales en los planteos judiciales para sostener su permanencia en La Plata.

Desde su entorno sostienen que los tratamientos médicos y psicológicos que requiere demandan una estructura sanitaria que permita respuestas rápidas ante eventuales complicaciones. Ese factor fue clave para que la Justicia habilitara el cambio de domicilio y evitara un escenario de mayor conflictividad legal por el incumplimiento de las condiciones del arresto domiciliario.

El Hospital San Roque de Gonnet es uno de los establecimientos públicos más importantes de la región. Funciona como hospital interzonal de referencia y recibe derivaciones de distintos puntos de la provincia de Buenos Aires. Su guardia mantiene una atención permanente y enfrenta una demanda sostenida, en un contexto de presión sobre el sistema sanitario público que se replica en gran parte del país.

Además de la atención de urgencias, el hospital se destaca por áreas como Maternidad y Neonatología, y cumple un rol clave como Hospital Escuela, con actividades de formación e investigación que sostienen la capacitación de profesionales de la salud. Al mismo tiempo, enfrenta desafíos estructurales vinculados a la alta demanda, la disponibilidad de turnos y el mantenimiento de la infraestructura.

La internación de Sala vuelve a tensar un expediente que en las últimas semanas había registrado movimientos significativos. La cuestión habitacional, la continuidad del arresto domiciliario y el seguimiento de su estado de salud se cruzan nuevamente en un escenario complejo, donde cada decisión judicial tiene impacto directo sobre su situación personal.

Hasta el momento no trascendieron detalles oficiales sobre el diagnóstico que motivó la internación ni sobre la evolución clínica de la dirigente social. El caso se mantiene bajo reserva y sin comunicados formales, mientras se aguarda información médica que permita clarificar el alcance del cuadro.

La combinación entre salud y proceso judicial vuelve a colocar a Milagro Sala en el centro de la agenda pública. La internación en un hospital público, sostenido por el sistema sanitario provincial, reabre debates sobre el seguimiento médico de personas privadas de la libertad bajo modalidades alternativas a la detención y sobre las condiciones en las que se garantiza ese derecho en contextos de alta exposición política y judicial.

Por ahora, la atención está puesta en su evolución y en las decisiones que puedan surgir a partir de este nuevo episodio, en un expediente que continúa activo y atravesado por múltiples dimensiones, tanto legales como sanitarias.

 


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