El debate por el estacionamiento medido en Quilmes derivó en incidentes y fuertes cruces públicos entre referentes políticos y sociales. La polémica comenzó cuando miembros del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), liderado por Juan Grabois, se movilizaron para manifestarse contra la medida que impulsa la municipalidad.
En medio de los disturbios, la exintendenta Mayra Mendoza respondió con un mensaje de voz a Grabois, cuestionando su accionar y acusándolo de fomentar la violencia. “El que quiere romper todo sos vos”, afirmó, y aseguró que le cuesta creer que compartan los mismos intereses y conducen bajo la misma orientación política.
La tensión se concentró este lunes frente al Concejo Deliberante, ubicado sobre la avenida Alberdi, donde se votaba la ordenanza que establece un sistema de estacionamiento medido. Los cuidacoches, conocidos popularmente como trapitos, aseguran que desde el municipio se les había prometido participación en la nueva modalidad.
Desde la municipalidad, destacaron que la ordenanza contempla la inclusión de los trabajadores preexistentes, pero que el procedimiento será a través de licitación pública, y no mediante adjudicación directa a cooperativas, tal como reclama el MTE. “Se está trabajando para ordenar el estacionamiento en Quilmes y generar empleo a partir de lo recaudado”, aseguraron desde el gobierno local.
Por su parte, Laura Cibelli, de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), explicó que llevan cinco años organizando a los cuidacoches y que la propuesta apunta a combinar inclusión social y ordenamiento del tránsito. Sin embargo, lamentó que recién se enteraron por los medios de la ordenanza, que no les permite presentarse como cooperativa en la licitación.
La respuesta de Grabois no se hizo esperar. A través de sus redes sociales, cuestionó el accionar municipal y policial, denunciando represión hacia militantes y trabajadores durante la protesta, y criticó lo que consideró una “privatización amañada” del estacionamiento medido.
El conflicto refleja un choque entre intereses sociales y administrativos, mientras la comuna busca implementar un sistema de estacionamiento que contemple regulación, inclusión laboral y recaudación, y los trabajadores exigen garantizar su participación en la gestión de la actividad. La discusión promete seguir en los próximos días, con atención puesta en la próxima sesión del Concejo Deliberante.
