La tranquilidad de Cafayate se vio alterada en los últimos meses por una serie de hechos delictivos que mantenían en vilo a vecinos de barrios privados y viviendas alejadas. Este fin de semana, la Policía de Salta informó que logró desarticular a la banda responsable, luego de una investigación que demandó cuatro meses de trabajo.
El operativo estuvo a cargo de la Dirección General de Investigaciones y contó con un despliegue importante en distintos puntos de la localidad. En total se concretaron 11 allanamientos en los barrios Socorro, El Recreo, Prelatura, Los Módulos y La Esperanza. Como resultado, ocho hombres mayores de edad fueron detenidos y puestos a disposición de la Justicia.
Durante los procedimientos se secuestraron diversos elementos vinculados a las causas: bicicletas, electrodomésticos, celulares y otros bienes que habrían sido sustraídos en distintos robos. También se encontraron armas de fuego, entre ellas escopetas, revólveres y fusiles de avancarga, lo que refuerza la hipótesis de que la banda actuaba con violencia en algunos de los hechos denunciados.
La investigación se había iniciado tras múltiples denuncias de damnificados que alertaban sobre robos bajo la modalidad “descuidistas” y en ocasiones con violencia, lo que llevó a un trabajo articulado entre las fuerzas de seguridad y la Fiscalía Penal de Cafayate.
Desde la Policía señalaron que la tarea incluyó un seguimiento minucioso de los movimientos de los sospechosos, recolección de pruebas y análisis de las denuncias presentadas en los últimos meses. Ese trabajo permitió identificar a los integrantes de la organización y solicitar las medidas judiciales que derivaron en los allanamientos.
Los ocho detenidos quedaron a disposición de la Fiscalía Penal y del Juzgado de Garantías de Cafayate, que llevan adelante las actuaciones correspondientes. En paralelo, se trabaja en la restitución de los bienes secuestrados a sus legítimos dueños.
El golpe a esta banda representa un alivio para la comunidad cafayateña, que había expresado preocupación por la sucesión de delitos contra la propiedad en zonas residenciales. Las autoridades destacaron que los controles continuarán en la región para reforzar la seguridad y evitar el resurgimiento de hechos similares.