San Ramón de la Nueva Orán, Salta, vive horas de conmoción tras un violento episodio que se cobró la vida de un adolescente de 16 años en la tarde del viernes.
El hecho ocurrió en la céntrica Plaza Santa Marta, un lugar concurrido por familias y jóvenes, donde la víctima fue atacada con un arma blanca por otro menor de 15 años. La brutalidad del suceso, captada por una cámara de seguridad, dejó atónita a la comunidad oranense, que reclama respuestas ante el aumento de la violencia juvenil en la región.
El ataque ocurrió cerca de las 17 horas, cuando el adolescente de 16 años se encontraba sentado en un banco de la plaza, un espacio emblemático de la ciudad. Según las primeras reconstrucciones, el agresor, también menor de edad, se acercó por detrás y, sin mediar palabra, le asestó una puñalada en la espalda. La víctima, gravemente herida, logró caminar por sus propios medios hasta el hospital San Vicente de Paul, ubicado a pocas cuadras. A pesar de los esfuerzos del equipo médico, que lo intervino quirúrgicamente de urgencia, el joven falleció debido a la severidad de la lesión.
Horas después del hecho, otro adolescente ingresó al mismo hospital con una herida punzocortante en la mano. Inicialmente, el joven aseguró haber sido víctima de un intento de robo, pero las autoridades lo identificaron como el presunto autor del homicidio. El menor, de 15 años, quedó detenido y a disposición del Juzgado de Menores de Orán, mientras la Brigada de Investigaciones de la Policía de Salta trabaja en la recolección de pruebas y testimonios para esclarecer los motivos del ataque.
El caso ha generado una profunda consternación en Orán, una ciudad que, aunque habituada a la convivencia pacífica, no es ajena a episodios de violencia. Vecinos de la zona, que prefirieron mantener el anonimato, expresaron su preocupación por la creciente presencia de conflictos entre adolescentes, muchos de los cuales, aseguran, están ligados a disputas personales o al consumo de sustancias. “La plaza siempre fue un lugar para compartir en familia, pero ahora da miedo. No puede ser que los chicos terminen así”, comentó una comerciante de la zona.