Un amotinamiento e intento de fuga de al menos diez presos detuvo en la noche del domingo los policías que se encontraban de guardia en la Comisaría Primera de Embarcación.
El hecho comenzó cuando unos diez reclusos que se encontraban en una de las cuatro celdas de la dependencia policiales (muchos de ellos ya tienen sentencia firme) comenzaron a pedir atención médica. Los uniformados hablaron con ellos y le informaron que solo cuatro de ellos serían trasladados al nosocomio local para ser observados. Esto fue interpretado como una provocación por los otros presos que comenzaron a generar incidentes.
Según relataron los uniformados, los reclusos totalmente alterados comenzaron a romper la tapa de una cámara séptica para hacerse de cimientos e intentar con ello romper los candados de la celda. Cuando esto fue advertido por los Policías en forma inmediata pidieron más recursos a la Unidad Regional de Pichanal y Orán para establecer el orden, debido a que los presos los superaban en números.
En otra de las celdas, los reclusos comenzaron a incendiar un colchón y ropa para provocar que la rejas sean abiertas e intentar evadirse hacia un patio interno y fugarse. Esto también fue frenado por la rápida intervención de los Bomberos que sofocaron las llamas en cuestión de minutos. “Nadie salió herido, solo hubo presos intoxicados por la inhalación de humo”, indicaron los uniformados.
Al arribar los recursos de Orán y Pichanal estos pusieron fin al amotinamiento de los 40 presos que se encontraban distribuidos en 4 celdas de seis metros por tres. Entre los reclusos que se encuentran en la Comisaría de Embarcación hay muchos que ya tienen sentencia firme en causas abuso sexual, robos a mano armada, y asesinatos. Todos ellos de alta peligrosidad. “Esto no debería ocurrir, los presos deberían estar en una cárcel”, señalaron los oficiales luego de poder frenar el amotinamiento y la posible fuga de los presos.
