El Año Nuevo 2026 propone una ruptura elegante con el clásico blanco de siempre: la mesa se tiñe de azul petróleo, un tono profundo y sofisticado que ya pisa fuerte en decoración, moda y montajes festivos.
La clave de esta tendencia es combinar sobriedad con calidez: materiales nobles, texturas naturales y detalles metalizados que elevan la mesa sin recargarla.
¿Por qué el azul petróleo y no el blanco?
Tres razones para entender por qué este color se impone:
Elegancia moderna: aporta presencia sin resultar estridente.
Versatilidad: funciona con dorado, plateado, nude, gris y maderas claras.
Ambiente cálido y sereno: crea una sensación nocturna perfecta para el 31 de diciembre.
Cómo armar una mesa de Año Nuevo en azul petróleo (paso a paso)
Base visual: elegí un mantel o camino de mesa en azul petróleo —es el ancla cromática del montaje.
Contraste suave: sumá servilletas en tonos arena, gris claro o blanco roto para suavizar la intensidad.
Vajilla neutra: la porcelana blanca o crema equilibra y hace que el azul destaque.
Detalles metalizados: incorporá toques en plateado frío, acero o dorado claro (cubiertos, bajoplato o pequeños porta-velas).
Centro natural: optá por hojas verdes oscuras, ramas secas o flores en tonos neutros. Evitá flores muy coloridas que compitan con el protagonista.
Texturas que abrigan: madera clara, fibra natural (como un bajo-plato de rafia), vidrio grueso y velas lisas añaden calidez.
Iluminación: luz cálida, velas y una guirnalda con luz tenue ayudan a completar la atmósfera nocturna.