El PAMI Salta tomó una decisión drástica: rescindir desde el 1 de agosto el contrato con Tisec SRL, empresa encargada de atender a afiliados en el Hospital Militar. La medida fue informada mediante carta documento y, según el organismo, corresponde a irregularidades detectadas que pondrían en riesgo la calidad del servicio.
La rescisión alcanza a alrededor de 17.000 jubilados y pensionados, a quienes el PAMI asegura “no se quedarán sin atención”. El director ejecutivo provincial, César Dib, destacó que se activó un plan de contingencia con prestadores públicos y privados de Salta para absorber la demanda. Clínicas como IMAC, Cruz Azul, Virgen de Urkupiña, Modelo y San Rafael estarían incluidas en el reemplazo.
Según detalló Dib, las irregularidades detectadas incluyen historias clínicas con datos incompletos, farmacia sin condiciones adecuadas, equipos obsoletos y desechar residuos patogénicos sin protocolos correctos. También faltaban respiradores y bombas de infusión, según la normativa vigente.
Ante el paro de servicios en el Hospital Militar, el PAMI confirmó que redirigirá a los afiliados sin que tengan que salir de la ciudad. Además, aclaró que el personal de Tisec “no depende del PAMI directamente”, por lo que la medida no constituye despidos del organismo, aunque abre incertidumbre sobre el futuro laboral de casi 100 empleados de la empresa contratista .
Para contener la situación, se conformó un esquema de derivación. El Dr. Leonardo Failla, del Grupo de Clínicas que asumirá parte de la atención médica, confirmó que se habilitarán nuevas camas y se reubicará a trabajadores de Tisec dentro de su red.
Desde los sindicatos y trabajadores de Tisec se expresó indignación por la falta de diálogo. El coordinador Diego Riservato adelantó una marcha prevista el día de la medida para exigir explicaciones y garantizar continuidad laboral y sanitaria.