La sinceridad de Cinthia Fernández volvió a generar repercusión en el mundo del espectáculo. En una charla televisiva con Moria Casán, la bailarina abrió su corazón y habló de un pasado que hoy observa con distancia. Reconoció que no se siente orgullosa de haber construido parte de su carrera mostrando su cuerpo en televisión y en campañas mediáticas, especialmente aquella recordada campaña política en la que apareció en hilo dental.
“Fue un papelón”, dijo sin rodeos, dejando en claro que esa etapa ya no la representa. La confesión sorprendió porque durante años Cinthia se convirtió en una de las figuras más mediáticas de la farándula argentina gracias a sus participaciones en el Bailando por un Sueño y a las producciones fotográficas que la consagraron como símbolo de sensualidad. Sin embargo, hoy su mirada es distinta: está enfocada en su rol como madre y en su formación académica, ya que actualmente estudia abogacía.
El debate con la One se dio en el programa La mañana con Moria, donde la conductora la interpeló sobre su presente y su futuro. La conductora, fiel a su estilo, defendió la postura de Cinthia en aquel entonces y le recordó que esa exposición también le abrió puertas en el medio. Pero la panelista insistió en que hoy no se siente orgullosa de esa etapa y que su prioridad es dar un ejemplo diferente a sus hijas, Charis, Bella y Francesca Defederico.
En ese sentido, Fernández reflexionó sobre la educación y las oportunidades que quiere brindarles. “Sueño que mis hijas tengan una herramienta, como por ejemplo el idioma, que yo no la tuve, para ver si tienen más posibilidades”, expresó. Sus palabras dejaron ver un cambio profundo en su manera de pensar: de la exposición mediática a la búsqueda de un futuro más sólido y estable para sus hijas.
