El jueves se llevó a cabo la primera audiencia conciliatoria entre Lizy Tagliani y Viviana Canosa, en el marco de la querella por calumnias e injurias que la humorista inició contra la periodista. Sin embargo, el encuentro no logró avances significativos, ya que no se llegó a ningún acuerdo conciliatorio.
Uno de los aspectos más llamativos de la audiencia fue la ausencia de Canosa, quien decidió no presentarse en los tribunales de Lomas de Zamora. En su lugar, participó su abogado Juan Manuel Dragani, pero lo hizo de manera virtual. Por su parte, Lizy Tagliani sí asistió de forma presencial, acompañada por su abogado Andrés Gauto Cardozo y por dos letradas que la asesoran en el trámite de adopción de su hijo.
Durante la mediación, Tagliani tuvo la oportunidad de expresar cómo la afectaron las acusaciones de Canosa, que no solo la señalaron por un supuesto robo, sino que también hicieron referencia a abuso de menores. A pesar de esto, la periodista se negó a retractarse de sus declaraciones, lo que impidió cualquier tipo de acuerdo entre las partes.
El abogado de Tagliani confirmó que la querella sigue adelante y que se fijará una nueva audiencia, pero esta vez solo para Lucas Bertero, otro de los involucrados en el caso. Una vez que se realice ese encuentro, se establecerá una fecha de juicio.
La postura de Lizy Tagliani
Tras la audiencia, Lizy Tagliani reafirmó su decisión de seguir adelante con la querella, asegurando que su honor y el de su familia están en juego. "Iremos a fondo con la querella porque mi honor es más grande que mi trabajo. Por eso estoy acá en la Justicia", expresó la conductora.
Además, destacó la importancia de sentar un precedente sobre la responsabilidad de las declaraciones públicas, especialmente cuando involucran acusaciones graves. "Para mí hay que sentar un precedente de poder llevar a la gente a la Justicia, sobre todo cuando se dicen tantas barbaridades de delitos tan graves", afirmó.