Fácil de cocinar, nutritivo y económico, el pollo salva muchas comidas y siempre es bienvenida una nueva receta para variar el menú familiar. La cocina vasca francesa tiene su "Poulet à la basquaise" ( que no es ni más ni menos que pollo a la vasca), que se hace todo en una olla o sartén, no requiere procedimientos raros y queda brutal.
Es una de esas comidas que conviene cocinar en cantidad, para guardarla en la heladera y repetirla un par de días después, porque va ganando en sabor.
Para hacer el pollo a la vasca, necesitamos:
1 pollo chico troceado
Aceite 3-4 cdas.( si es de oliva mejor)
1 diente de ajo
1 cebolla grande
1 pimiento rojo o verde
1 lata de tomate triturado o al natural ( 400 g)
1 cubo de caldo de gallina
1 hoja de laurel o la hierba que nos guste ( tomillo, romero, albahaca seca)
sal y pimienta a gusto
Opcional: 100cc de vino blanco seco
- Trocear el pollo sin quitarle todos los huesos ( porque le dan sabor) y dejándole o no la piel, eso es a gusto. En una cazuela antiadherente con 1 cucharada de aceite de oliva, dorar lentamente los trozos de pollo, dándole tiempo a que tome buen color y deje su fondito de cocción. Sacarlo de la fuente y reservar. Mientras tanto, cortar un poco el tomate, laminar los dientes de ajo, y cortar la cebolla y el morrón en aros o ruedas, o trozos medianos.
- Una vez dorado el pollo, en la misma cazuela con un chorrito de agua despegar el fondo con una cuchara de madera. Disponer todas las verduras y cocer durante 15 minutos a fuego lento. Añadir los trozos de pollo, la hierba elegida, el vasito de vino y otro de agua, el cubito de caldo, la pimienta y rectificar de sal si fuera necesario.
- Tapar y dejar cocinar a fuego lento durante 40-45 minutos, removiendo de vez en cuando. El pollo debe quedar bien tierno y cocido. La compañía para este pollo es a criterio del cocinero, pero se puede sugerir un arroz blanco, papas hervidas o al horno o una deliciosa polenta.